La fuerte sequía que atraviesan las Pitiusas y la falta de frío han dado como resultado que este año la producción de aceite de oliva de Ibiza sea la segunda más baja de la historia de la marca Oli d’E, creada en el año 2009.

En total, se han producido 11.798 litros este año, un 36 por ciento menos que el pasado cuando se consiguieron 18.600 y la mitad de los más de 21.000 litros que lograron en el año 2013, hasta ahora la mejor cosecha.

Marià Tur, presidente de la Agrupació de Defensa Vegetal i Sanitària de l’Olivar d’Eivissa, que agrupa a 67 productores ibicencos, admitió ayer en rueda de prensa que 2016 «ha sido el peor año con diferencia para el olivar», a pesar de que el aceite producido ha sido de muy buena calidad.

Según explicó Joan Marí, ingeniero técnico agrícola de la agrupación, los motivos de esta limitada producción son la falta de terreno apto para el cultivo de aceituna certificada, apenas un centenar de hectáreas: 59 de agricultura integrada y 36 ecológicas.

Además, se han detectado que hay variedades de olivo «poco adaptados» a la isla, procedentes de Castilla la Mancha o Aragón, que necesitan temperaturas de unos 7-10 grados y que, a partir del año que viene, tendrán que descartarse porque se ha detectado «una falta de buen cuajado de los frutos».

A esto se han sumado las condiciones climatológicas adversas de los últimos tres años que provocan una mala nutrición de los árboles. «Los olivos han sufrido mucho y ya veremos si el año que viene tiene la suficiente fuerza para volver a producir», advirtió Marí. De hecho, 3 de las 15 marcas que están bajo el paraguas de Oli d’E no han podido producir nada este año.

Los responsables de la marca de Oli d’E explicaron que el año que viene pretenden aumentar tanto el número de agricultores que quieran producir aceite certificado como el de hectáreas cultivadas.

La actual producción se consume íntegramente en Ibiza pero el objetivo a partir de ahora es exportar el aceite fuera de la isla. «Nos están pidiendo de otros lugares de la península pero no podemos porque no producimos suficiente aceite», afirmó Marià Tur.

En cualquier caso, tal y como recalcó el presidente de la agrupación, el aceite de Ibiza «ha progresado mucho» desde el año 2009, gracias al aumento de los socios que forman parte de la organización y del número de las marcas, que han pasado de las 3 iniciales a la quincena que hay en la actualidad.

«No podemos competir en cantidad pero sí en calidad», indicó Tur, quien explicó que el aceite ibicenco se basa en unos principios de calidad en los que se descarta recoger aceitunas de suelo o hacer una segunda prensada.

La agrupación celebrará mañana a las 17 horas una jornada técnica en el centro de exámenes de conducir de Santa Gertrudis para informar a los agricultores sobre nuevos métodos de plantación y mejora de sistema de riego en la que participará también el Consell d’Eivissa para explicar las ayudas insulares a la plantación de olivos.