El temporal de fuertes vientos que dejó rachas de más de 70 km/h provocó la suspensión de la rúa de carnaval de Sant Antoni, que estaba prevista para la tarde de ayer.

Las fuertes rachas de viento registradas durante la madrugada no presagiaban un cambio en las condiciones meteorológicas y la organización se reunió a mediodía para tomar una decisión sobre la celebración de una rúa que iba a congregar a más de 1.500 personas.

Al mediodía, el Ayuntamiento de Sant Antoni confirmaba la suspensión de los actos. Según informaron fuentes municipales, el servicio de Emergencias 112 mantenía la alerta naranja hasta la noche y, siguiendo las directrices de Protección Civil y Policía Local, decidieron suspender el desfile.

Más de 1.500 personas de 35 agrupaciones tenían previsto participar en la celebración organizada por el consistorio portmanyí, que ahora deberá fijar una nueva fecha en el calendario.

El desfile iba a recorrer las principales calles del pueblo, saliendo de la avenida doctor Fleming, atravesando la avenida de Portmany hasta la rotonda Nord, para después desfilar por el Passeig de ses Fonts y el Passeig de la Mar. No obstante, las adversas condiciones meteorológicas suponían un riesgo.

Conexiones complicadas

La alerta naranja de riesgo importante por fenómenos costeros para Ibiza y Formentera se mantuvo durante todo el día y las mayores complicaciones se registraron a primera hora del día, cuando algunas conexiones con Formentera fueron canceladas y otras supusieron un calvario para el pasaje por las embestidas de la mar.

En tierra firme, los efectos del temporal se tradujeron en la caída de varios árboles y daños en elementos del mobiliario urbano.

Los bomberos tuvieron que actuar a primera hora de la mañana para retirar dos árboles. Según informaron fuentes de los bomberos, pasadas las 9 horas una dotación tuvo que desplazarse a la carretera que une Can Tomás y Sant Rafel ya que un árbol caído obstaculizaba el paso. Al terminar este servicio tuvieron que trasladarse al kilómetro 3 de la carretera de Sant Josep para cortar una gran pita que había caído sobre la carretera. La Guardia Civil cortó temporalmente el tráfico para facilitar los trabajos de limpieza.