El diputado nacional fue la figura elegida por consenso para encabezar el PP ibicenco después de la dimisión de Vicent Serra, que dejó el cargo tras las elecciones locales de 2015 en las que el Partido Popular perdió el gobierno en el Consell d’Eivissa y en los ayuntamientos de Vila, Sant Josep y Sant Antoni después de una convulsa legislatura en la que se evidenciaron las diferencias internas.
Una de las misiones fundamentales de Marí Bosó durante este tiempo como presidente interino ha sido el de unir a las dos familias ‘populares’ enfrentadas: los ‘serristas’ y los ‘salistas’. Un objetivo que a tenor de las palabras de los presidentes de las juntas locales parece haber conseguido. «Agradezco las consideraciones pero ha sido el trabajo de todos durante este año y medio y el de centrarnos en los problemas de los ciudadanos y no tanto en nosotros y pensar que somos los responsables de dar soluciones a lo que nos pide la gente», apuntó ayer Marí Bosó.
En este mismo sentido el exconseller balear d’Hisenda aseguró que el trabajo de unión y de limar asperezas que se ha llevado a cabo en el PP balear «no se hace de la noche a la mañana por poner a un presidente. Insisto: ha sido el trabajo de todos».
Interinidad
Marí Bosó dejó claro que él no se plantea nada más allá del próximo congreso insular, que todavía no se ha convocado y que debería celebrarse antes del verano, y que su posición al frente del PP de Ibiza «forma parte de una respuesta excepcional a una situación excepcional que fue la dimisión de Vicent Serra».
El presidente del PP de Ibiza descartó pronunciarse sobre si tiene intención de presentar candidatura en el próximo congreso insular en el que «lo importante es que haya un debate entre los afiliados sobre las soluciones a los problemas de los ciudadanos de Ibiza de cara al 2019 y quiénes tienen que llevarlas a cabo, pero esto se verá más adelante», señaló Marí Bosó.
LA NOTA
La pugna entre ‘serristas’ y ‘salistas’
La primera batalla librada entre ‘serristas’ y ‘salistas’ se produjo para la elección del candidato al Consell d’Eivissa en las elecciones de 2011. La imputación de Pepe Sala por el caso de ses Variades impidió al ‘portmanyí’ optar a este puesto. En una decisión salomónica, Bauzá pactó con los dos aspirantes que Vicent Serra sería finalmente el candidato al Consell y Enrique Fajarnés repetiría en la lista al Congreso de los Diputados. Un año después, Serra y Sala se vieron las caras en el último congreso insular del PP de Ibiza.
El entonces ya presidente del Consell d’Eivissa se llevó el gato al agua al superar por 22 votos al senador pitiuso, Pepe Sala. La legislatura 2011–2015 pasó factura al PP, que perdió el gobierno en el Consell y los ayuntamientos de Vila, Sant Antoni y Sant Josep.
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