Antonio Ribas se estrena al frente de la patronal insular del taxi con una voluntad continuista respecto a su antecesor, el ‘combativo’ Alejandro Cardell. Tras presidir durante años la asociación de Sant Josep, el nuevo presidente de la Fitie tiende la mano a las administraciones de cara a estudiar un posible adelanto del servicio de estacionales, siempre que el volumen de turistas les obligue a ello.

—Ya expresó su línea continuista pero, ¿cuáles serán sus prioridades al frente de la patronal?
—En la isla de Ibiza tenemos asociaciones en los cinco municipios, nos ayudamos entre nosotros con el trabajo, procuramos hacernos trabajos puntuales en horas puntuales. El sistema GPS es lo que nos ha integrado un poco a todas las asociaciones. Se creó la federación para tener el GPS integrado y ponerlo en marcha con vistas a estar todos integrados. Pienso que es un servicio mucho más positivo que por la radio; entran alrededor de 20.000 llamadas en un día en pleno verano. Estamos acabando de consolidar el tema del GPS, estamos añadiendo cosas como el sistema VIR, se tiene que optimizar el servicio con el GPS y cuando veamos que ya da todo de sí lo próximo sería poner una APP (aplicación móvil) en marcha.

—¿En qué ha mejorado el servicio del taxi con el GPS único?
—Permite que estemos localizados. Cada ayuntamiento tiene preferencia para sus servicios pero en el momento que no hay disponible uno de ese municipio salta directamente al otro, el que esté más cerca. Esto repercute en un servicio mucho mejor y más dinámico para todos. Ahora hemos incorporado el sistema VIR, es un sistema de voz con el que se puede pedir el taxi por teléfono sin hablar con el operador. Todo esto agiliza el trabajo porque aunque no lo parezca hay 20 personas para cubrir los teléfonos en los diferentes turnos. También está ‘taxinet’, que muchos hoteles lo tienen y apretando un botón queda pedido automáticamente el taxi.

—¿Qué novedades y cómo se presenta el servicio para esta temporada?
—La novedad este año es el VIR, por lo demás parece que la temporada va a ser muy buena, que va a haber mucho trabajo. Ya están diciendo que en abril van a abrir un 20% más de hoteles, en mayo también. Luego a partir de abril va a haber un 10% más de vuelos y pasajeros de media. Es positivo para el sector y cuanto más organizados estemos mejor podremos trabajar y mejor será el servicio. Aunque sí que hay unas aglomeraciones muy difíciles de darle servicio, como las salidas de las discotecas o en el aeropuerto cuando hay vuelos con retrasos, se juntan muchos vuelos en 10 o 15 minutos. Algunos pasajeros tienen servicio discrecional con los minibuses en la puerta, pero siempre hay momentos puntuales en los que se forman colas. Aunque para la prensa es el momento oportuno para hacer la foto y decir que hay muchas colas para coger el taxi, hay que pensar en que se da un servicio y que eso pasa en todo el mundo.

—¿Les beneficia la falta histórica de un transporte público moderno y eficiente?
—El taxi de alguna forma ha sido el servicio que han tenido las instituciones para hacer lo que no hace el transporte público, como el autobús aquí en Ibiza. Donde no llega el bus siempre ha estado ahí el taxi para hacer este servicio.

—¿Esta circunstancia ha hecho al sector del taxi un ‘lobby’ fuerte en Ibiza y con capacidad para ejercer presión?
—Algo quizá, pero yo pienso que no estamos aquí para medir fuerzas. Estamos para llevarnos bien, hacer el servicio que hay que hacer y cada uno hacer su trabajo. Las instituciones también tienen mucho trabajo que hacer, lo hacen, y nosotros igual.

—¿Deberían comenzar todos los municipios al mismo tiempo el periodo de estacionales?
—Ya que estamos en toda la isla compenetrados para cargar donde haga falta... El Consell se basa en las entradas del aeropuerto y las aperturas de hoteles, sobre todo en Platja d’en Bossa. Quizás el municipio de Sant Josep es donde más falta van a hacer los taxis, pero indistintamente hay otros municipio que a lo mejor no tienen nada pero pueden colaborar con las horas punta cuando hay necesidad. En el momento que Sant Josep ponga todos los estacionales a trabajar si los pone antes que otros municipios de alguna forma parece que ellos se lo guisan y ellos se lo comen y que cada uno se busque la vida. Los otros municipios no estarán en contra, les creas agravio comparativo porque les va bien venir a trabajar a Sant Josep y aprovecharse un poco de la temporada baja. Si estamos todos juntos trabajando con el mismo GPS, tiene que haber una solución para dar servicio donde hace falta, sería un punto muy positivo.

—¿Cuál va a ser entonces la novedad para esta temporada en el servicio del taxi?
—De momento no nos hemos reunido para dilucidar el tema de si se puede empezar en mayo. Hay previsiones que dicen que sí, que va a haber más hoteles abiertos y más llegadas al aeropuerto. Pero la pregunta sería, ¿lo podemos suplir entre todos o vamos unos por libre? ¿Pueden empezar 15 días antes los estacionales? Yo pienso que si no se da abasto y los otros municipios no vienen a colaborar en los momentos de hora punta, sí que tendremos que estudiar otras posibilidades. Nosotros no decimos ‘ni hablar de mayo’, somos susceptibles de estudiarlo, pero me gustaría que se tuviera en cuenta en los otros municipios. No podemos mirar nuestro ombligo diciendo aeropuerto, playa... Necesitamos lo que necesitamos. Pero también quiero decir que gente en Vila que cogía su turno en mayo este año lo van a suprimir. Osea que la gente estará trabajando todo mayo y en Sant Josep tenemos turnos previstos hasta finales de abril. De momento nos planteamos la posibilidad de que después de Semana Santa sigamos sin librar en esos turnos en Sant Josep. Si se cumplen las previsiones nos adaptaremos a lo que hay.

—¿Considera que en verano hay suficientes taxis para dar un buen servicio?
—Si estos estudios dicen que hacen falta equis licencias, pues igual hay que dar algunas, pero claro es que nosotros estamos haciendo el servicio que no hace el transporte público. Ahora hay unas 400 licencias fijas en toda la isla y en agosto llegamos a 700 con los estacionales. Este inicio de temporada va a haber más servicios. El Consell nos ha dicho que ya podemos ir a pasar la ITV, que estemos listos para cuando se acuerde empezar. Yo creo que con los taxis que hay podemos hacer el servicio que haga falta en mayo, pero si vemos que la cosa va muy ajustada para la segunda quincena podríamos ver de empezar. Como los taxis estarán con la ITV preparada, podremos estudiarlo, pero yo creo que con los 400 taxis que hay podemos dar el servicio hasta junio.

—¿Van a insistir en pedir un sistema de lectura de matrículas en el aeropuerto para detectar taxis piratas?
—Por lo que sé no están funcionando. Nos gustaría que las instituciones hicieran su trabajo y que haya inspectores para controlar las actividades ilegales, sea taxis pirata o venta ambulante. Hay mucha actividad ilegal en la isla y se tendrá que buscar alguna solución para atajarlo. Nuestro trabajo es mover los clientes de un sitio a otro.

—¿Hubo menos intrusismo el año pasado por la presencia de Policía en el aeropuerto?
—Hubo algo más de presencia, creo que este año va a haber más todavía en las zonas conflictivas y a horas puntuales en el aeropuerto, Platja d’en Bossa... Hemos hablado con administraciones y parece que sí se va a tener en cuenta.

—¿En qué punto se encuentran sus reivindicaciones para poder entrar al puerto? ¿Han dado su brazo a torcer?
—Este es un tema más de la asociación de Eivissa, no creo que esté zanjada esa reivindicación aunque parece que el tema de poder entrar al puerto lo han dejado solo para que entren los piratas. Los piratas tienen entrada al puerto, ellos no tienen problemas. Problemas, para los taxis.

—¿En qué medida puede afectar al servicio el cambio de circulación de las principales avenidas de Vila?
—Todo lo nuevo es difícil opinar, si lo que retrasamos por un lado lo adelantamos por otro.. Ahora sí que es verdad que las tres arterias principales –avenida de Espanya, Ignasi Wallis y avenida de Santa Eulària– están colapsadas en pleno verano. No se puede circular y hay clientes que antes de llegar te dicen que pares, se bajan, se pagan antes de terminar la carrera y encuentras metido en un atasco con un follón de mil demonios y te lo tienes que tragar. Ya no te puedes dar la vuelta. Si es una fórmula de entrar por un lado y salir por otro, y da velocidad y fluidez al tráfico puede ser positivo, pero hasta verlo y probarlo, es difícil opinar.

—¿Y la carretera de Santa Eulària? ¿Qué dicen los clientes?
—Es desesperante, pero es que tenía que haber estado hecha en el momento que se hizo la doble vía de Sant Antoni. Parece que lo de dar soluciones, como que no. No sé por qué. Yo no sé, hicieron una encuesta de si se quería o no, cuando ya estaba el proyecto hecho y el dinero aprobado. Estamos perdiendo el tiempo cada día, y no hablemos del atasco de Jesús. Los clientes te preguntan qué pasa, pero no podemos parar el taxímetro porque vamos también por tiempo. El cliente se queja y no entiende por qué pasa esto pero no puedes hacer nada. Si estamos una hora para ir a Santa Eulària, estamos una hora, el taxímetro marca en función de los kilómetros pero también a nivel de reloj, que creo que va a 20 euros por hora.

—La alta estacionalidad y quizá la codicia de algunos provoca jornadas abusivas de más de 12 horas. ¿No se pone en riesgo a los clientes y a los propios conductores?
—Accidentes de taxistas hay pocos. Se conocen los cruces peligrosos, pasamos cada día por las mismas carreteras y los mismos sitios. Hoy en día no creo que haya tanta gente que hace 12 horas. Algunos las harán, pero que cambie de turno a las 12 horas tampoco quiere decir que no se haya movido del asiento en 12 horas. Para a cenar, a comer, desayunar... No es que estés 12 horas al volante. Mucha gente tiene este horario en verano, no es cosa de los taxistas, pero se van a casa a comer o a tomar algo. O sentado una hora en el aeropuerto porque hay retrasos, se echan una pequeña siesta...

—El colectivo parece este año mucho más calmado, ¿ésa va a ser su política al frente de la Fitie?
—El plan de estacionales es bianual entonces si ya está hecho del año pasado, ya está. Se fijó que fueran cuatro meses en Sant Josep y dos turnos de tres en el resto, y ya está. No tiene por qué haber agitación ahora, el año pasado hubo porque el gobierno trabajaba un poco a nuestra espalda sin contar mucho con el sector. Por lo que me han dicho mis compañeros, la comunicación estaba bajo cero. Lo hicieron así y a quien no le guste que no le guste. Si fuéramos un sector tan fuerte como usted dice, nos harían más caso.