El Balmoral es el primero de los 17 cruceros turísticos que harán escala en Ibiza durante el mes de abril –el año pasado lo hicieron 15–, pero con 218 metros de eslora, solo es el quinto por orden de envergadura. Entre el 28 y el 30 de este mes está prevista la llegada del Mein Schiff 2 (263 metros), el Vision of the Seas (279), el Costa Fascinosa (290) y el Brillance of the Seas (294).
Autoritat Portuària de Balears (APB) maneja una previsión de 191 escalas en Ibiza a lo largo del presente ejercicio, lo que supone un incremento del 38% respecto a los 138 cruceros que visitaron la isla el año pasado.
Con 218 metros de eslora y 7,2 de calado, el Balmoral es el más grande de los cuatro barcos que opera la división de cruceros de Fred.Olsen (Cruise Line). Debe su nombre a la residencia escocesa de la familia real británica y en ese sentido también están decoradas sus 710 habitaciones, así como sus salones y restaurantes.
El crucero, que inició la travesía el día 5 en la ciudad británica de Southampton, llegó ayer a Ibiza proveniente del puerto gallego de Ferrol y permaneció atracado hasta las 21 horas antes de poner rumbo a la ciudad menorquina de Mahón.
Pasadas las 13.30 horas comenzaron a desembarcar buena parte de los 1.180 cruceristas británicos que lleva a bordo el buque de la compañía noruega radicada en las Islas Canarias. En la estación marítima del pantalán sur de es Botafoch aguardaban una decena de autobuses turísticos. Alrededor de 200 visitantes habían contratado alguna de las excursiones organizadas para visitar zonas emblemáticas como Dalt Vila o Ses Salines. Otros muchos decidieron hacer turismo por su cuenta, recorriendo el centro de la ciudad y el conjunto amurallado, y dejando algo de dinero en los comercios, terrazas y restaurantes de las zonas próxima al puerto.
3 comentarios
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Si el año pasado hubo exceso de gente... este año señores no va a ver ni aire para respirar.Miedo me da ibiza con la escasez de servicios y lo poco preparada que esta para aglomeraciones.
Pues se debieron de encontrar obras, socavones, atascos, así nada más salir del puerto. vaya imagen más pésima, señores. Quizás este año, debido a tanta obra no deberían haber acordado que llegaran tantísimos cruceros este año. Poca visión, para no variar
Y pueden disfrutar de una estación marítima de primera categoría, de unas aceras con unos bordillos de 40 cm. de alto para que les cueste un poco mas subir a ellas, y una lineas de autobuses que salen para todas las direcciones, vergüenza ajena.