El Conservatorio de Ibiza acogió ayer a cerca de 350 escolares de primaria de las escuelas Can Guerxo, Can Misses, sa Graduada y La Consolació dentro de su programa Les Escoles al Conservatori. El objetivo, ofrecerles en concierto El Blues del Conservatorio, una pieza que el compositor ibicenco Adolfo Villalonga ha elaborado para la ocasión con la misión de dar a conocer los distintos instrumentos que existen y las técnicas para hacerlos sonar a través de distintos solos. «En cada solo, el propio profesor da a conocer aspectos técnicos del instrumento de cara a los chavales», explicó el músico.

Una composición realizada por encargo ex profeso para este concierto que se estrenó ayer y que su compositor disfrutó bastante realizándola. «Tiene formato de jazz y lo bueno es que previamente, a las escuelas participantes se les envió un audio para que los chavales participaran en el concierto con percusiones corporales como chasquidos con la lengua o los dedos o incluso palmadas», dijo Villalonga a la vea que añadió que «se trata de que sean parte también del espectáculo y de que participen en esta pieza tan simpática que puede recordar al estilo del compositor de la banda sonora de la serie de animación La Pantera Rosa, Henry Mancini. Un blues con alma de jazz pero donde todo está escrito y no hay espacio a las improvisaciones».

Los chavales asistentes al concierto también pudieron disfrutar de la interpretación de un arreglo de Hay un amigo en mí, canción que forma parte de la banda sonora de la película producida por Walt Disney Pictures y Pixar Toy Story. «Nos lo hemos pasado como chicos preparando la música para los chavales y esperamos que ellos también la disfruten mucho», dijo Villalonga antes del acto.

Y por su parte, entre los espectadores, a Rocío de Can Gerxo le pareció «un concierto fantástico y maravilloso porque se parece mucho al jazz». Una estudiante que toca la flauta en las clases de música de su escuela y no descartaba aprender alguno más en el Conservatorio. El violín, la batería, el contrabajo y alguno más fueron algunos de los instrumentos que más gustaron a los chavales, con permiso del oboe, clarinete, saxo alto, trompeta, trompa, trombón, piano, órgano, viola o la guitarra, allí presentes.

Un concierto que gustó mucho por «cómo sonaban los instrumentos» o «porque me encanta la música», explicaba alguno de los estudiantes que no descartaba apuntarse a las clases del Conservatorio, permiso de su madre mediante.

Les Escoles al Conservatori es una iniciativa que se lleva a cabo desde hace unos años con motivo de la apertura del plazo de inscripción para estudiar en el centro y en la que participa todo el profesorado del Conservatorio de Ibiza. Unos conciertos que se repetirán a lo largo de los dos martes próximos (2 y 9 de mayo) y por los que pasarán más de 1.100 alumnos de distintas escuelas de Ibiza en los distintos pases que se llevarán a cabo de este Blues del Conservatorio.