Imagen de la parada de Bartomeu Roselló, en Vila.

La Federación Insular del Taxi de Ibiza ha reiterado que no secundará la huelga nacional de este 26 de abril, como adelantó ayer en exclusiva este periódico, al considerar que existen otros problemas más importantes en la isla. Además, ha abogado por mantener el servicio para no perjudicar a los residentes. Según el presidente de la entidad ibicenca, Antoni Ribas, «existen otros problemas más importantes» y no se sienten «identificados» con las peticiones que se hacen en el comunicado nacional, que tildan de «políticas», ni con el procedimiento seguido, por lo que han rechazado unirse a estos paros.

Ribas instó a los conductores de la isla a que este miércoles acudan a trabajar con normalidad. Según dijo, «la huelga está promovida por sectores minoritarios y no han contado con la opinión y necesidades de todas las asociaciones».

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«Si existe algún colega que sí se siente identificado con las peticiones del sector nacional, queremos que tenga total libertad de manifestarse», añadió.

Desde la Fitie afirmaron que en la Isla tienen varios puntos más urgentes que resolver, como el de los taxis pirata, y creen que es necesario «concentrar todos nuestros esfuerzos en llevarlos a cabo».

Sobre las reivindicaciones expresadas al Ministerio de Transporte Terrestre, Ribas explicó que «hay puntos que no están en manos del Gobierno sino de la Justicia, como el de revocar licencias de VTC que se han otorgado aprovechando un vacío legal, entre otros».