Imagen de la concentración que se celebró ayer en Ibiza para protestar contra el incremento de las furgonetas VTC en la isla. | DANIEL ESPINOSA

Alrededor de una veintena de taxistas pararon ayer de trabajar por la mañana para protestar contra el aumento de las licencias de Vehículos de Alquiler con Conductor (VTC) de nuevas empresas como Uber o Cabify en la Península. Ambas empresas aún no han llegado a la isla, pero desde Élite Corsaris d’Eivissa avisaron de que un incremento de estas licencias en la Península conllevará que puedan trasladarse a Ibiza a trabajar ya que no implica que deban moverse donde estén registradas. En otras palabras, una VTC de Madrid o Barcelona puede venir a trabajar a Ibiza.

«Nos hemos concentrado para protestar contra el aumento de las VTC que habrá en la Península y que repercutirá en Ibiza. Queremos que se controle la entrada y salida de estos vehículos porque el problema es que ahora no se están controlando las VTC», explicó David Povedano, secretario de Élite Corsaris d’Eivissa, quien recordó que los vehículos VTC deben estar previamente contratados por una empresa para poder realizar el servicio y no pueden recoger gente en las paradas como sí hacen los taxistas, algo que al parecer sí que está ocurriendo. También hay que recordar, según explicaron, que los vehículos de cortesía que ponen a disposición de los clientes hoteles y beach clubs en Ibiza, por ejemplo, no pueden cobrar por un desplazamiento ya que debe ser gratis. «Existen en la actualidad furgonetas de cortesía que cobran por los servicios», precisó Povedano, quien añadió que en Ibiza hay más furgonetas VTC circulando de las que realmente tienen licencia. «Exigimos más medios y más eficacia para que haya un control real», precisó.

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La concentración y el paro de servicio, convocados por la asociación Élite Taxi a nivel nacional, se desarrolló ayer a nivel nacional. En la capital de España, cerca de 1.000 taxistas protestaron contra el aumento de las VTC de nuevas empresas como Uber y Cabify. Los taxistas reivindicaron en Madrid que el Gobierno defienda al taxi como servicio público, además de criticar que estas empresas les están haciendo competencia desleal ya que muchas de estas VTC esperan y cogen clientes por la calle cuando no pueden hacerlo.

En el caso de Ibiza, la protesta de ayer no fue secundada por la patronal insular del taxi al considerar que existen otros problemas más importantes en la isla, como el de los taxis pirata y creen que es necesario «concentrar todos nuestros esfuerzos para resolverlos».

Desde Élite Corsaris d’Eivissa recordaron que empresas como Uber y Cabify aún no están en la isla, pero eso no significa que en un futuro puedan estar presentes y reivindicaron la unidad del taxi de Ibiza para hacerles frente.