«Adlib debería de realizar una selección si quiere ser internacional»

—¿Por qué no ha estado este año Charo Ruíz ni en el catálogo que ha editado el Consell d’Eivissa, ni en la Pasarela Adlib 2017?
—En el catálogo no participé porque tengo el mío propio. No me parecía que tuviera que estar. En cuanto a la Pasarela, ha sido porque este año teníamos previsto hacer un showroom (presentación de las colecciones) para clientes nuestros que vienen de Nueva York, Italia, Francia, Madrid.

El tema de Adlib es muy interesante, pero en conjunto. Este año los diseñadores han presentado 10 looks, pero mi colección tiene más de 100 modelos. Era mucho más interesante para la empresa hacerlo en privado que en la Pasarela Adlib. Ha sido por motivos de empresa, porque yo en Adlib he participado mucho.

—¿Y cómo ha vivido lo de no participar este año?
—Bueno, estuve allí, apoyando en lo que he podido, a los diseñadores y a la vicepresidenta del Consell Marta Díaz que trabaja muchísimo.

—¿Qué le pareció la Pasarela Adlib 2017?
—Pues como siempre, unas cosas me gustan más que otras. Hay diseñadores que lo hacen mejor que otros y en general, bien.

—¿Cuál es su diseñador preferido?
—A mí me parece que Tony Bonet tiene colecciones muy interesantes y el desfile que me pareció precioso fue el de las joyas de Elisa Pomar; me pareció muy digno, muy bonito. En general, unos diseñadores me gustaron más y otros menos.

—En este sentido, he oído que su ausencia en la Pasarela Adlib de este año ha estado relacionada con la calidad de las prendas que se muestran, los lugares en los que se fabrican y una necesaria criba de lo que debería salir y lo que no, que en opinión de muchos, no se realiza, ¿es cierto?
—Un poco de esto puede haber también. Hay que pensar que hay dos formas de hacer un desfile: uno para el pueblo de Ibiza, que está muy bien y que se lo merece ya que son tres días de fiesta en los que la gente va a disfrutar y pasarlo bien, y otro que sería hacer un desfile a nivel internacional. En este caso habría que hacer una buena selección de los diseñadores que van a presentar sus creaciones porque no se puede presentar cualquier prenda ni cualquier cosa que no esté fabricada, si no en Ibiza porque no hay tantos talleres en la isla, sí en España y con una cierta categoría. Tendría que haber una criba, un control de calidad y obviamente hay que exigir mucho a los diseñadores para que realmente sea un desfile muy trabajado el que presenten. También es cierto que no todo el mundo puede y eso lo complica porque quieren desfilar muchos que no están capacitados, pero por otro lado se les da una oportunidad.

—¿Qué opina de la labor institucional en el marco de Adlib?
—Creo que las instituciones lo están haciendo muy bien al apoyar de esta manera a los diseñadores. Marta Díaz está trabajando muchísimo en la labor de la promoción y demás. Pero si hablamos puramente de Adlib, yo también tendría en cuenta esa idea de la selección o criba para hacer algo a nivel más internacional de calidad con colecciones importantes.

—¿Cómo es la colección que va a presentar esta tarde en el Gran Hotel Montesol?
—Pues se ha cocinado muy lentamente, mimándola, trabajándola, mirando hacia atrás en los modelajes trayéndolos a un momento mucho más actual y moderno que yo creo que va a sorprender. Trabajaremos con los guipures que yo siempre llevo pero con tejidos nuevos que creo que van a dar que hablar.

—¿Cuál es la esencia que, considera, define a los looks que presentará hoy?
—Creo que la mezcla ya que cada modelo va representado con diferentes tejidos que se pueden mezclar. La variedad de tejidos y de diseño me parece que será lo más fresco y actual que como colección puedo presentar. Es algo que he disfrutado mucho trabajando.

—¿En qué se ha inspirado esta vez?
—Siempre lo hago trabajando con mi maniquí, poniéndole tejidos, cortando y recortando. También gracias a mi equipo de gente joven que me ayuda muchísimo y que tiene muy captada mi esencia.

—¿Por qué ha elegido Vara de Rey y el Gran Hotel Montesol como escenario de la presentación de su colección en solitario?
—Desfilo en un paseo que nos ha dado muchos dolores de cabeza, pero también en Montesol, un lugar al que yo venía mucho cuando llegué a la isla en 1978 y que era como mi casa. Me hace mucha ilusión desfilar aquí.

—¿La volveremos a ver en la Pasarela Adlib?
—No lo sé. Falta un año. Me encantaría, pero dependerá un poco de cómo se desenvuelva el trabajo que estamos haciendo con nuestro representante y la exigencia de la firma y de lo que la empresa necesita.