Imagen de archivo de los trabajos previos para poner en marcha el nuevo emisario de Talamanca.

El nuevo emisario de Talamanca, que el Govern puso en marcha el pasado 1 de julio, está funcionando desde el primer día «a pleno rendimiento» cuando el flujo del antiguo se cambió al nuevo y, de manera automática, la infraestructura antigua dejó de funcionar. Hasta la fecha no se ha registrado ninguna incidencia ni problema con la nueva tubería, según precisaron desde el Govern. En cuanto a si la vieja tubería, que salía por la bahía de Talamanca, se retirará desde el Ejecutivo autonómico explicaron que la dejarán en el fondo del mar ya que si se retirara sería peor «a nivel ambiental y de la posidonia que se ha establecido en los alrededores y encima».
El nuevo emisario de Talamanca entró en funcionamiento el pasado día 1 después de que el 28 de junio se declarara la emergencia de las obras y se encargara la ejecución inmediata de los trabajos cuyo presupuesto fue de 7,2 millones. La nueva infraestructura puede soportar un caudal máximo de 4.000 metros cúbicos por hora, el doble que antes, en previsión de la construcción y puesta en marcha de la nueva depuradora de Ibiza.
El antiguo emisario de Talamanca tenía 32 años y estaba en muy malas condiciones, lo que ha generado durante muchos años rotura de la tubería con los consecuentes vertidos. Sólo en el año 2015, la vieja tubería se rompió cuatro veces. Estos vertidos provocaban, a su vez, el cierre de la playa al baño con bandera roja y con la consecuente pérdida económica para los negocios de la zona de playa. Los vecinos y empresarios de Talamanca denunciaron ante Fiscalía estos vertidos, pero al ver que se ponían en marcha las obras y se acometían los trabajos retiraron la denuncia.