Imagen de archivo de un coche de la Policía Local de Sant Josep. | Archivo

La Policía Local de Sant Josep realizó el martes por la noche un control en la zona de Platja d’en Bossa que saldó con 36 denuncias de las cuales 34 fueron por venta ambulante, una por resistencia a la autoridad y otra por tenencia de estupefacientes. Durante la intervención, en la que participaron varias patrullas de la Policía Local, se procedió a la identificación de cinco individuos de origen senegalés que se dedicaban al menudeo. Los policías efectuaron registros superficiales y le encontraron a uno de ellos una pequeña cantidad de drogas. Una vez acabados los registros personales, y continuando con el control, los agentes municipales encontraron en las proximidades de la zona donde se desplegaban los cinco identificados diversas cantidades de estupefacientes. Más tarde, y continuando con la inspección de las calles adyacentes, se localizó en una valla exterior de un hotel una bolsa con diversas drogas. Los agentes vigilaron por si aparecía el ‘dueño’ de esas sustancias, pero no apareció.

Los agentes acabaron el control con el decomiso de todas las sustancias que habían encontrado, así como con varias denuncias. Una por tenencia de estupefacientes, 34 por venta ambulante y una por resistencia a la autoridad, según se establece en la Ley 4/2015 de Seguridad Ciudadana.

Por otra parte, el pasado domingo la patrulla de servicio detuvo a un ciudadano ucraniano que golpeó a un taxi en la rotonda del Tapa-Tapa mientras conducía un Land Rover que pertenecía a una empresa náutica. El conductor que golpeó al taxi se dio a la fuga y, posteriormente, se le localizó y puso resistencia para ser detenido. En dependencias policiales se le practicó una alcoholemia que dio un resultado de 0,80 mglr/l, por lo que se le imputó un delito de resistencia a la autoridad y un presunto delito de conducción bajo los efectos del alcohol.