El exconseller Joan 'Botja' y la activista Carmen Tur, entre los presentes. | Youtube: Periódico de Ibiza y Formentera

Más de 200 personas acudieron ayer tarde a es Martell para reivindicar un puerto para todos los ibicencos a través de una 'castanyolada' coincidiendo con la celebración del Vuit d'Agost. La convocatoria, que se realizó a través de las redes sociales y contaba con el apoyo de la plataforma 'Prou! Pitiüses en acció', surgió a raíz de un incidente con un megayate el pasado mes de mayo cuando una de las embarcaciones atracadas junto a es Martell elevó tanto la música que la exhibición que en ese instante se estaba llevando a cabo tuvo que suspenderse.
Una 'brulada de corn' anunció el inicio de lo que en principio iba a ser tan solo una 'castanyolada y que, al final, se convirtió en una auténtica 'ballada pagesa'. Como es tradicional, los 'sonadors' y 'castanyolers' formaron en círculo y tras varios minutos a ritmo de 'llarga', se rompió el hielo y empezaron las 'ballades' ante la satisfacción del numeroso público presente y la atenta mirada de varios policías portuarios.
Entre los asistentes al acto destacaba el exconseller insular de Cultura i Patrimoni, Joan Marí 'Botja', a quien se le vio muy suelto tocando el 'tambor'. Tampoco faltó a la cita la incombustible activista Carmen Tur.
"Reivindicamos todo lo que hemos perdido en este tiempo y que nos costará muchísimo en volver a recuperarlo.
Les hemos dado un ejemplo de que las cosas pueden, si no ser como antes, al menos muy parecidas. ¡Y que tomen nota todos estos que critican!", apuntó Tur, quien añadió que era la primera vez que acudía a es Martell desde que lo habían renovado.
Entre los que participaron de la 'ballada' estaba Juanjo Torres, quien lució una camiseta con lemas reivindicativos, tanto en inglés como en catalán: 'Los turistas ricos empobrecen la isla' y 'Tants en vengueren que de casa ens tregueren'. Otro de los participantes fue Joan Marí Ferrer, quien destacó que el acto "no era para ir contra nadie sino a favor de los ibicencos y de nuestras tradiciones". Marí Ferrer también dejó abierta la puerta a que este acto espontáneo vuelva a celebrarse en otras ocasiones. "Si decimos de volvernos a juntar, lo haremos otra vez el año que viene", aseguró.