Una encuesta realizada entre 248 comercios de la Zona Comercial Abierta La Marina Puerto de Ibiza corrobora las primeras impresiones que a principios de verano ya dieron los dueños de los locales sobre la que se auguraba una nefasta temporada. Según esta encuesta, respondida por 195 propietarios y 53 gerentes o encargados, casi el 60 por ciento de los locales aseguran haber visto cómo sus ventas han caído en un 30 por ciento este año.

El 15 por ciento afirma que sus ventas ha descendido en un 20 por ciento, el 6,8 por ciento dice que bajaron en torno a un 10 por ciento mientras que, por otro lado, solo un pequeño porcentaje de los locales encuestados asegura haber aumentado sus ventas.

Malas perspectivas

Más preocupante si cabe es la respuesta que dan los dueños de los bares, restaurantes y tiendas de moda acerca de si volverían a abrir su negocio en esta zona: un 44,81 por ciento asegura que no lo haría frente a un 45,35 por ciento que opina lo contrario. Entre las respuestas más comunes de quienes han contestado que sí abrirían de nuevo en el mismo lugar, destacan: «sí, porque son propietarios de los locales comerciales», «sí, aunque depende de los próximos meses» y «sí, porque es un punto estratégico de ventas aunque en continuo deterioro».

De hecho, uno de los datos más reveladores que arroja esta encuesta es que el 58 por ciento de los comerciantes reconoce que la zona de la Marina y del puerto ha dejado de ser interesante para su negocio.

Por otra parte, los motivos de quienes han contestado que no abrirían de nuevo un comercio en esta zona son la falta de acceso y de aparcamiento, la falta de actividad promocional, la escasez de servicios o incluso la impunidad en la venta de droga. Además, la mitad de los encuestados afirma que abriría su negocio en otra zona.

Los resultados de la encuesta también valoran negativamente algunos aspectos como la limpieza. Más de un 54 por ciento cree que es muy deficiente, mientras que un 44 por ciento destaca que la seguridad de la zona también deja mucho que desear.

Otro de los aspectos que mayor oposición ha obtenido por parte de los comerciantes es el cierre al tráfico de la zona con la barrera, que el 72 por ciento considera que ha perjudicado gravemente sus negocios. Asimismo, el 74 por ciento de los comercios creen que los nuevos cambios de circulación previstos por el Ayuntamiento de Ibiza a partir del mes de octubre afectarán negativamente a sus negocios y solo el 2,73 por ciento considera que serán beneficiosos.

Noticias relacionadas

Los propietarios de los locales comerciales han aportado también una serie de propuestas para tratar de mejorar la situación: habilitar más zonas de aparcamiento para que los clientes puedan acceder a a zona, mejorar la limpieza y la seguridad, contar con presencia policial durante el día y la noche, quitar la barrera para permitir el acceso a la zona comercial o eliminar los puntos de venta de drogas.

La presentación de esta encuesta fue precisamente el motivo por el que una representación de la Federación de Comerciantes de La Marina Puerto de Ibiza, entidad que agrupa también a los comerciantes de la calle de la Virgen y del Mercat Vell, mantuvo ayer una reunión con el alcalde de Eivissa, Rafa Ruiz, y varios miembros del equipo de gobierno municipal.

La respuesta del Ayuntamiento a las quejas de los comerciantes, según señaló la concejala de Comercio, Gloria Corral, fue que se ha ampliado el aparcamiento de es Gorg en 400 plazas y se ha habilitado un autobús gratuito hasta el interior del puerto.

No obstante, reconoció que este nuevo servicio todavía no es lo suficientemente popular entre visitantes y residentes, por lo que explicó que, de cara a la próxima temporada el Ayuntamiento publicitará el autobús gratuito entre los establecimientos turísticos del municipio.

LA NOTA

Maleta pequeña y poco dinero y tiempo

La concejala de Comercio de Vila considera que la mala temporada se debe al cambio del perfil del turista que visita la isla: visitantes que vienen en vuelos low cost con poco dinero para gastar, con una estancia que no supera de media los cuatro días en los que no queda mucho tiempo para las compras y una maleta de reducidas dimensiones que no les permite llevar demasiadas cosas.

Gloria Corral considera además que el malestar entre los propietarios de los comercios se debe a que «tal vez las expectativas para esta temporada eran muy altas».

La concejala señaló también que la bajada de ventas se debe a otros factores como que existen otras zonas competidoras del puerto como Platja d’en Bossa.