La instalación de tres marquesinas frente a la estación de autobuses Cetis, en obras para acometer la reforma necesaria para su reapertura, ha levantado las primeras críticas entre los funcionarios judiciales que trabajan en el edificio por las molestias que el trasiego de usuarios provocará cuando las líneas estén en marcha.

Según señalaron desde la Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) a través de un comunicado, la instalación de tres paradas en la entrada principal del Edificio Judicial del Cetis es «un despropósito», ya que están ubicadas frente a cuatro Juzgados de Primera Instancia, Registro Civil, Servicio Común de Actos de Comunicación y Embargos (SCACE), así como la sede de la Fiscalía.

Los funcionarios criticaron que la presencia de estas marquesinas «supone que, de forma continua, al menos tres autobuses de más de 10 metros de longitud cada uno de ellos impedirán el contacto visual con la fachada de dicho edificio con lo que ello supone en materia de seguridad», a lo que hay que sumarle, añadieron, «decenas de personas esperando el autobús unidos a los propios usuarios de la sede judicial que a diario acceden a la misma».

Otro de los inconvenientes es, según apuntaron desde el sindicato, que los cimientos de una de las tres marquesinas se encuentra a metro y medio de la puerta de acceso al edificio judicial. «Esto supone, en caso de hipotética evacuación de dicha sede por cualquier circunstancia, la dificultad que le supondría a todos aquellos que se encontraran en el edificio para abandonarlo con fluidez», señalaron.

Asimismo, el sindicato CSIF cuestionó la existencia de algún informe técnico que avale la instalación de las marquesinas y puso «en duda» el hecho de que los técnicos municipales se hubieran puesto en contacto con el Ministerio de Justicia para realizar estas obras.

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Eivissa justificaron la instalación de estas marquesinas asegurando que el Cetis es «una estación con paradas proyectadas tanto en el sótano del edificio como en los alrededores a pie de calle». Según señalaron fuentes municipales, las líneas «se pueden repartir arriba y abajo en función de sus frecuencias y usos».

Las tres paradas de autobús, afirmaron desde Vila, «han estado proyectadas en superficie desde el principio» y han sido aprobadas tanto por los técnicos municipales como los del Consell d’Eivissa «teniendo en cuenta todo lo que se requiere para llevar a cabo su ubicación».

El equipo de gobierno municipal sostiene además que «no hay razón para la preocupación» acerca de su ubicación, ya que «se ha revisado en numerosas ocasiones todas las cuestiones relacionadas con la seguridad».

Desde Vila, recordaron además que la ubicación actual de los juzgados es provisional y que las obras del futuro edificio judicial acabarán el próximo año.