Vicent Torres regresó ayer a sus ocupaciones como presidente de la máxima institución insular, después de haberse mantenido apartado de sus funciones durante los dos últimos meses y medio tras sufrir un ictus el pasado 2 de julio.

El dirigente socialista se mostró sonriente y con muy buen semblante físico tras presidir el Consell Executiu. Durante la convocatoria, dirigida a los medios gráficos, bromeó con los periodistas asegurando que «nunca ha perdido la buena cara», si bien admitió que irá incorporándose paulatinamente al trabajo al frente del Consell Insular. A partir de ahora acudirá unas horas a su despacho, aunque no pudo confirmar su presencia en el pleno que tendrá lugar a finales de mes.

«Más o menos estoy recuperado. Hay que ir poco a poco. Hoy es el primer día y luego ya veremos», explicó Torres, que reconoció haber estado pendiente de la actualidad y la política insular durante su convalecencia. «Siempre hay temas que preocupan más que otros», puntualizó mientras observaba la agenda de trabajo de su jefa de gabinete, Patricia Abascal. Aunque el pasado 8 de agosto reapareció en un vídeo felicitando a los ibicencos por las fiestas, las secuelas del infarto cerebral que le mantuvo tres días ingresado en Can Misses le han obligado a guardar reposo y a regular ahora su regreso a la actividad como presidente de la máxima institución insular.