Según informaron ayer fuentes de los bomberos, fue un vecino próximo quien alertó al 112. El comunicante advertía que llevaba un día sin ver a su vecino, de 82 años, quien vive en una casa unifamiliar en la Vènda de Xarracó, Can Mayans.
Hasta la zona se desplazaron dos bomberos para realizar una apertura de puerta pero el servicio se complicó ya que no pudieron acceder con su vehículo hasta la vivienda por las características del camino.
Los efectivos tuvieron que trasladarse con otro vehículo y trasladar los utensilios a pie los últimos 300 metros. Finalmente, accedieron a la vivienda por una ventana. El hombre estaba consciente pero muy deteriorado. Los bomberos lo trasladaron en una silla hasta la ambulancia que lo evacuó a Can Misses.
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