Imagen de archivo del colegio del CEIP Labritja.

La delegada territorial de Educació, Margalida Ferrer, afirmó ayer que las obras del nuevo comedor del CEIP Labritja están finalizadas y que esperan poner en marcha el servicio durante este mes de octubre.

Esta semana está previsto que llegue la autorización de Sanidad y la próxima semana está previsto que se haga la contratación entre la Conselleria de Educació y el catering, que irá a cargo de la empresa Catering s’Olivera, encargada de los menús de los centros educativos de la isla.

Retraso

En un principio, la intención era que el comedor empezara a funcionar coincidiendo con el inicio del curso escolar, aunque ya contaban con «un pequeño retraso» debido a la lentitud de los trámites administrativos. De todas formas, Ferrer señaló que «empezará seguro este mes en cuanto esté la documentación lista». «Estamos contentos de ponerlo en marcha, ya que da respuesta a una demanda de hace años. Es un servicio que llevaban tiempo pidiendo las familias y también el Ayuntamiento de Sant Joan», apuntó la delegada territorial, que recordó que el colegio también lo pidió el curso pasado con una aprobación del Consell Escolar.

Ahora esperan que «funcione bien» y «ayude a conciliar la vida familiar y laboral». En este sentido, aseguró que las familias hicieron un estudio que decía que habría unos 20 alumnos diarios que harían uso del servicio de comedor, además de los esporádicos, aunque «después habrá que ver cuál es la realidad», precisó la delegada de Educació en las Pitiusas.

Obras

En julio se iniciaron las obras del nuevo comedor en el CEIP Labritja que han consistido en la adecuación del espacio donde se albergaba el antiguo comedor del centro, así como la dotación y equipación necesaria para ofrecer este servicio. El presupuesto destinado a esta nueva instalación es de 32.551 euros.

Sant Joan era el único municipio que no contaba con comedor escolar, por lo que los alumnos que requerían de este servicio tenían que acudir a comedores de otros municipios. La creación de un comedor escolar en el colegio Labritja es una petición de la comunidad educativa desde hace años. De hecho, es el único municipio que carece de este servicio.