Valerie Anderson es una de esas personas convencidas de poder cambiar el mundo y para eso trabaja con dedicación cada día. Es escocesa, miembro de la ONG Ruda Tanzania y organizadora de este evento que mañana se celebra por segundo año consecutivo en Sant Joan durante el mercadillo de los domingos. En esta ocasión lo recaudado se destinará a comprar un ordenador portátil y un proyector para que los niños de la escuela primaria NMSE del suroeste de Tanzania en la zona de Ruvama, una región rural, puedan ver películas y documentales que les permita mejorar y profundizar en su educación.

Es un proyecto a través del cual la ONG de origen escocés comenzó a construir la escuela en 2010 en respuesta a una demanda de la sociedad de esa zona de Tanzania. Anderson recuerda a PERIÓDICO de IBIZA Y FORMENTERA que el primer año había una clase, un dormitorio, porque muchos niños que viven lejos duermen ahí al carecer de transporte que los lleve de vuelta a sus casas, y baños. Comenzaron con unos 20 niños de los pueblos cercanos mientras que se preguntaba por la zona quiénes necesitaban más ser apadrinados, por ejemplo familias muy pobres o hijos de madres solteras que deseaban ir a la escuela fueron apadrinados por gente en su mayoría escocesa. Con los años se pudieron ir construyendo más aulas, más baños, más dormitorios y más padrinos; incluso algunos vecinos de Sant Joan se encuentran entre ellos. Ahora la escuela está completa en el sentido que alcanza los 7 niveles, desde «parvulitos». Actualmente acuden más de 150 niños, de los cuáles alrededor de 50 ya están apadrinados; es decir que reciben el dinero necesario para pagar su educación y cubrir necesidades relacionadas con la misma, como el uniforme. La educación del resto de los niños es costeada por sus padres, «es una escuela de mejor nivel que las estatales, bilingüe en inglés y suajili, mientras que las estatales son únicamente en suajili. El problema es que las escuelas secundarias son en lengua inglesa por lo que muchos niños abandonan por no entender el idioma», explica Valerie quien viaja a Tanzania cada año.

Hay que recordar que la ONG Ruda Tanzania trabaja junto a una asociación local llamada Ruvuma que tiene como finalidad mejorar la calidad de vida de la gente, y realizan las obras según sus necesidades reales.

Anderson recuerda que durante su estancia en la escuela de Tanzania «les leo cuentos, trabajo con los libros... a ellos les encantan los libros». Y expresa su mayor deseo de este año: «Quiero llevarles un proyector y un ordenador portátil para que los profesores puedan bajar a través de una conexión 3G por USB películas y documentales ya que desde este año cuentan con electricidad, y si sobra dinero desearía llevarles máquinas de coser».

‘Proyecto África’ será un domingo especial con tres músicos africanos, baile africano, un grupo de percusión, paella popular, una subasta solidaria con donaciones de los artesanos del mercadillo y puestos solidarios, aunque Valerie contará con un puesto propio cuya recaudación irá íntegramente destinada también a la ONG.

Con lo recaudado en la edición del pasado año se construyó en la escuela NMSE un sistema de recogida de agua de lluvias con canelones, tubos y cisterna subterránea con el fin de que al poder utilizar este depósito se recuperan las reservas naturales de agua subterránea.

Vale la pena destacar que dentro de la labor altruista de Valerie se encuentra la conexión que ha generado entre la escuela africana y la de Sant Joan. Entre ellos se escriben cartas, intercambian vivencias e incluso han realizado una jornada especial llamada ‘Africa Day’ en la que los niños ibicencos cantaron una canción que les enseñaron sus amigos africanos, fabricaron una pelota de fútbol utilizando periódicos y bolsas de plástico para luego jugar con ellas descalzos y llevaron un cubo de agua en la cabeza con mucho cuidado de no derramar gota.