Actividades y buen tiempo se unieron ayer para seguir celebrando las fiestas de Santa Gertrudis.

Con motivo de las fiestas de Santa Gertrudis, la localidad organizó ayer, por primera vez, el esmorzar pagès gracias al trabajo de la comisión de fiestas. Con la plaza del pueblo llena y con actividades para todos los gustos, los allí presentes pudieron disfrutar de una mañana diferente al aire libre en la que, además, acompañó el buen tiempo.

Un domingo muy completo en el que se celebró el tradicional campeonato de ajedrez en el que participaron decenas de niños. Concentrados y con los movimientos claros, daban jaque mate al aburrimiento. Mientras tanto, el ambiente de fiesta no cesó gracias al taller de cocas, bunyols y orelletes en el que participaron los alumnos de sexto curso del colegio Santa Gertrudis. «No sé si sabrá rico, pero me está quedando bastante bonito», decía una de las niñas.

«Tenemos un horno donde estamos haciendo cocas en tiempo real porque no creíamos que iba a venir tanta gente y no nos da tiempo a servir suficientes», explicó Bernat Ribas, de la comisión de fiestas. Y es que para ser la primera vez que se celebrara esta fiesta el ambiente no podía ser mejor. «Nos daba un poco de pereza venir hasta aquí porque no sabíamos lo que nos íbamos a encontrar y estamos encantados», dijeron unos padres que veían cómo estaban disfrutando sus hijos.

También se disputó la carrera Dirt Track (Motocross), a cargo del Motoclub de Formentera i Eivissa en el antiguo campo municipal de fútbol. Lugar en el que, por la mañana, se hizo una torrada popular y, por la tarde, se jugó al tir amb bassetja.

«La acogida ha sido muy buena para ser la primera vez que lo hacemos. Por nuestra parte, no hay queja», dijo Ribas quien ya piensa en la edición del año que viene.