Imagen de archivo de vecinos de Santa Eulària recogen sus jaulas para atrapar las serpientes. | Archivo - Periódico de Ibiza

El Consell d'Eivissa destinará este año 9.000 euros al pago de las trampas para cazar serpientes que confecciona un carpintero de la isla y que son distribuidas en la Cooperativa Agrícola de Santa Eulària. Según ha informado la institución a Europa Press, en 2018 se encargarán 200 trampas, misma cantidad que en 2017.

El carpintero que las fabrica, han recordado, cobra 45 euros por cada una.

Por su parte, desde el Ayuntamiento de Santa Eulària han reconocido estar pendientes de si «en 2018 es necesario encargar más trampas». Según han recordado, el pasado año ya se llegó a un acuerdo para distribuir 200 jaulas a través de la Cooperativa, destacando que han encargado dos lotes en los últimos años.

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Desde la Cooperativa Agrícola de Santa Eulària han asegurado que en estos momentos no hay «tanta demanda» de trampas debido a que con el frío las serpientes hibernan. «Igualmente nos estamos acopiando de jaulas para poder abastecer a los clientes cuando vengan a buscarlas en primavera. Por ahora, hay disponibilidad de trampas y recomendamos que se hagan las cosas con tiempo y previsión», han explicado.

El pasado junio, responsables de la Cooperativa destacaron las listas de espera que se produjeron a la hora de adquirir una de estas trampas puesto que se confeccionan de manera artesanal y la demanda era muy elevada. Su coste ronda los 15 euros, incluyendo el pequeño ratón que sirve como cebo.

Por otra parte, han recordado que este año a la hora de adquirir una trampa se aplicarán los mismos protocolos de actuación que en 2017, con consejos para mantener la jaula en buenas condiciones o qué hacer si se caza una serpiente. En el protocolo que deben firmar quienes recogen una de estas cajas se explica que cada uno debe ser responsable de las capturas y se recomienda comprobar varias veces a la semana si se ha logrado capturar algún ofidio.

También se aconseja que las jaulas sean colocadas en zonas donde hayan sido vistos reptiles o roedores, como paredes de piedra o gallineros, entre otras recomendaciones.