Las tres componentes de Poison Ivy. | Joan F. Ribas

Mañana sábado todos los que acudan hasta el mítico Can Jordi Blues Station, en la carretera que une Ibiza con Sant Josep, podrán escuchar el primer disco del grupo ibicenco Poison Ivy: Poison factory. Desgraciadamente no será en concierto sino a través de los altavoces del bar a partir de las 13.00 horas y como aperitivo de la actuación de Fuel Pressure Regulator.

Poison Ivy es una banda de rock punk creada en 2015 por tres mujeres – SilviaSan, guitarra y voz, SilviaCo, bajo y coros, y ElenCat, batería y voz punk – que decidieron retomar su pasión por los instrumentos después de años de parón y que poco a poco se ha ido ganando al público ibicenco. Su primer concierto lo dieron en julio de 2016 y aunque las obligaciones de las tres no les permite juntarse todo lo que quisieran, su música «cañera y pegadiza» ha hecho bailar a multitud de residentes en Ibiza.

«Yo siempre digo que somos un grupo de chicas que un día decidieron coger los instrumentos para divertirse cantando covers y que a base de ir probando y actuando han conseguido tener un estilo de rock sencillo y ligero con influencias que van desde los ibicencos The Frígolos a clásicos como Johnny Burnette, Stray Cats o Wanda Jackson que a mi me gustan a Creedence o Led Zepellin que prefiere nuestra batería Elena», resumió ayer la cantante del grupo SilviaSan a PERIÓDICO DE IBIZA Y FORMENTERA.

Doce temas de producción propia

Precisamente esos ensayos y conciertos han sido el germen de lo que es su primer disco, Poison factory. «Casi de repente y sin querer nos fuimos dando cuenta que nos salían temas con letras de cosas cotidianas que nos pasan en nuestro día a día, decidimos escribirlas y ponerlas en limpio, y tras probarlas en algunas actuaciones, vimos que funcionaban y que la gente bailaba con ellos».

Y desde ahí dieron el salto al estudio de grabación. Sin embargo SilviaSan explicó que el proceso ha sido algo distinto al habitual. «Cuando quisimos darnos cuenta teníamos doce temas que nos parecían buenos y como teníamos grabaciones de teléfono móvil donde todo se escuchaba fatal pensamos que sería buena idea grabarlos para tenerlos nosotras de recuerdo». Para ello se pusieron en manos de Miquel Botja y su estudio MP Music en Can Savina y gracias al «magnífico» trabajo de Denis German consiguieron «una grabación estupenda que nos sorprendió a nosotras mismas» y que las hizo animarse para dar el salto y convertir los temas en un disco físico.

Además todo se demoró más de lo normal debido a que, entre otras cosas, la bajista SilviaCo reside en Barcelona y viene cuando puede a Ibiza. «En agosto hicimos una prueba con dos temas, luego en septiembre ella tuvo una semana de vacaciones que cuadramos para estar en el estudio, yo pasé unos días más metiendo guitarras y voces y finalmente, el máster estaba terminado en noviembre y el cd físico en nuestras manos en enero».

Tras ver la luz Poison factory está compuesto por doce temas de producción propia que además del formato físico también se pueden encontrar en plataformas digitales, Spotify, iTunes, Amazon y otras. «Es una maravillosa locura, todavía no me creo lo que hemos conseguido y cuando escucho los temas del disco aún dudo de si somos nosotras, un grupo amateur de amigas que un día de 2015 decidieron volver a juntarse para dar salida a su pasión por la música», concluyó bromeando SilviaSan.