La Peña Deportiva no pudo con la efectividad del Alcoyano (3-0). Tres goles destrozaron a los de Dani Mori que se acercan al precipicio y están obligados a ganar los tres partidos que quedan si quieren tener opciones de evitar el descenso a Tercera División.
El partido no fue bueno. Ni los ibicencos, ni los alicantinos ofrecieron su mejor versión. La diferencia fue la efectividad. Los de Alcoy mostraron su cara más goleadora, mientras que los de Santa Eulària se estrellaron contra el portero local Miguel Bañuz que estuvo sobervio.

La anécddota del duelo la protagonizó la Peña que saltó al cesped de El Collao con la camiseta visitante del Alcoyano. La expedición viajó de blanco y el árbitro no les permitió jugar así. En lo futbolístico, el peso del partido lo llevaron los locales que tuvieron más ocasiones. En la primera parte, cuando parecía que se iba a llegar al descanso con el 0-0. Gonzalo Poley adelantó al Alcoyano con un libre directo. El atacante sorprendió ejecutando un lanzamiento raso. La barrera saltó e Imanol quedó vendido.

Tras el paso por vestuarios, la Peña pudo empatar el choque. El disparo de Guille Andrés buscó la escuadro pero Miguel Bañuz, portero local, hizo un vuelo para mandar al córner. Fue la clave del partido, pues dos minutos después, en el 60, Nieto hizo un auténtico golazo para matar a la Peña. Casi sin tiempo para asimilarlo, Mariano, a la salida de un córner. Cerró el encuentro con un cabezazo.

La derrota hace que los de la Villa del Río pongan un pie en Tercera División. Sólo un milagro evitaría el descenso.