El Festival Barruguet llena Santa Eulària con cientos de niños

La edición de este año ha contado con numerosas actuaciones gratuitas en la calle, como por ejemplo la actividad Peixos, de la compañía catalana La Residual o Canviar de cara, de la compañía mallorquina Lila Jocs Reciclats, de las que se ha podido disfrutar durante estos días en el passeig de s’Alamera. También ha contado con sesiones de pago que tuvieron lugar en el Teatre Espanya, el Palau de Congressos y el edificio del Club Nàutic. Estas funciones, que son de pago, oscilan entre los 5 y 9 euros y se pueden adquirir tanto a través de internet como de forma presencial.

Peixos, por ejemplo, es una producción que lanza un mensaje de respeto y conservación hacia el mar y el mediterráneo. «Pretendemos, de una manera muy educativa, pedagógica y lúdica que los niños y niñas vean el mar con respeto y que entiendan su papel dentro de la conservación del mediterráneo», explicó Toni Vila, de la compañía La Residual. La producción va acompañada de mensajes positivos para que la gente se dé cuenta «de la necesidad de cuidar el mar».

La compañía, que viene invitada al festival por el Ayuntamiento de Santa Eulària, vino hace dos años con una producción llamada Ecojuga, que consistía en unos juegos reciclados con residuos. Este año, sin embargo, estrenaron una nueva. «Es muy apropiada ya que estamos a tres metros de la playa», añadió Vila.

En este taller los participantes, después de disfrutar de un rato de juego y aprendizaje, podrán hacerse una marioneta de pescado decorada artísticamente por ellos mismos y llevársela de recuerdo.

Unos metros más allá, al final del passeig de s’Alamera, la compañía mallorquina Lila Jocs Reciclats (Juegos Reciclados) presenta Canviar de cara, con un carrusel y algunos juegos. «Lo que hacemos es construir juegos a partir de materiales de deshecho», contó Emiliano, de la compañía organizadora.

Lila cuenta con más de 100 juegos diferentes, de los que solo podemos ver una pequeña parte aquí. Emiliano, artesano de profesión, explicó que todo empezó «cuando vivía en Asturias, que me encargaron hacer cinco juegos tradicionales». A partir de ahí empezó a buscar información, inventó nuevos juegos y así hasta ahora.

El proyecto se sostiene a través de la autofinanciación y cuando participan en festivales, como el de Barruguet en Santa Eulària, ponen una hucha para los padres y madres que quieran colaborar y el resto corre a cargo de su bolsillo. Han estado en lugares tan dispares como Argentina o Australia y su última aventura fue en Gambia y Senegal, donde hace tres meses estuvieron «construyendo juegos para niños y niñas en las escuelas».

Hay un elemento común en todos estos sitios. «Da igual a dónde vayamos, esto funciona y a los niños les gusta». Emiliano añadió que le sorprendió que la idea funcionara cuando empezó con ella. «Esto es algo muy básico y sencillo y ahora vivimos en una época de gran desarrollo tecnológico en la que los niños siempre van con pantallas», relató.

El festival, impulsado por el consistorio, cuenta con la colaboración de Sa Xerxa de teatro infantil y juvenil de las Illes Balears y el Institut d’Estudis Baleàrics. Estas jornadas tienen como objetivo abrir un espacio de encuentro, intercambio y debate con los profesionales participantes en el festival para las personas que se dedican en las Pitiusas a cualquier área de las artes escénicas (teatro, circo, magia, narración oral...).

También han servido de escenario para la presentación del primer gran proyecto de coproducción balear de espectáculos de artes escénicas para público familiar. Surgida desde el Teatro Principal de Palma, esta iniciativa está desarrollando un montaje de la compañía ibicenca Clownidoscopio, bajo la dirección de la danesa Gitta Malling.

El proyecto de coproducciones estrena este año el espectáculo ‘Refugi’, de la compañía ibicenca Clownidoscopio Teatre, una formación creada en Ibiza en 2009. Creada y dirigida por David Novell y Monma Mingot, acerca el teatro a toda la familia mediante el humor y la poesía del clown.