La discoteca Privilege, situada en una urbanización de Sant Rafel, está considerada como una de las más grandes del mundo. | Ultima Hora

Bahía de San Antonio S.A., empresa vinculada a la familia Matutes, se ha hecho con el 100 % de las acciones de la discoteca Privilege después de que la Audiencia Provincial de Palma haya desestimado el recurso de apelación interpuesto por la empresa de su antiguo socio mayoritario, José María Etxániz, a la sentencia del Juzgado de lo Mercantil número 2 de Palma que declara «perfeccionado» y, por lo tanto, que cumple con todos los requisitos legales, el contrato de compraventa de las 5.500 acciones de Baltanxa S.A. (la empresa de Etxániz) y escriturarlas a nombre de Bahía de San Antonio S.A.

Etxániz pretendía que la Justicia anulara el artículo 6 de los estatutos sociales de Baltanxa, que prevé que cuando el socio proponga transmitir sus acciones «a persona extraña a la sociedad», los socios podrán optar a la compra dentro de los veinte días siguientes a la notificación y que en caso de discrepancia en el precio de compraventa de las acciones el Registro Mercantil nombre a un auditor para que determine dicho precio.

Bahía San Antonio, ejerciendo su derecho de adquisición preferente, notificó en tiempo y forma su intención de adquirir las acciones de Baltanxa pero señaló que no estaba de acuerdo con el precio de 23,8 millones de euros que Etxániz había puesto sobre la mesa, por lo que aplicaría el artículo 6 de los estatutos para que un auditor de cuentas independiente fijara el precio de las acciones. Fue entonces cuando Etxániz decidió retirar su oferta y propone un cambio del sistema de transmisibilidad de las acciones a la Junta «cuya única finalidad no es otra que propiciar que el socio mayoritario pueda vender sus acciones a terceros y por el precio que desee y burlar el derecho de adquisición preferente hecho valer por el otro socio y por el precio que se determine por un experto independiente», señala la sentencia fechada el 30 de julio de 2018.

Además, se señala que Etxániz intentó en la Junta celebrada el 26 de enero de 2016 una «modificación íntegra» de los estatutos sociales «sin haber informado debida y suficientemente a los demandantes y sin justificar la necesidad de ello, con un informe débil e insuficiente ante los cambios que debían ser votados con posterioridad».

Tras la sentencia, que todavía no es firme ya que cabe recurso de casación y extraordinario por infracción procesal ante la Sala Primera de lo Civil del Tribunal Supremo, sólo queda pendiente la determinación del precio por parte de un auditor independiente que tase las 5.500 acciones de Baltanxa para que Bahía San Antonio se haga con toda la propiedad de Privilege.