Imagen de Anwaar Lahrichi-Greenwood difundida por una amiga que alertó de la desaparición.

La Guardia Civil ha confirmado que el joven hallado muerto el domingo en la bahía de Sant Antoni es Anwaar Lahrichi-Greenwood, británico de 24 años que se encontraba de vacaciones en la isla junto a unos amigos y que desapareció la madrugada del sábado tras una noche de fiesta, según denunció una amiga horas antes del trágico hallazgo.
Según informaron ayer fuentes de la investigación, la autopsia ha confirmado que el joven murió ahogado el mismo sábado y se descarta la muerte violenta. El Instituto de Medicina Forense y Legal ha tomado muestras para comprobar si el ahogamiento estuvo relacionado con una posible ingesta de drogas y alcohol.
El joven, que debía haber regresado la tarde del sábado a Londres, salió la noche anterior con unos amigos.
Según los datos recabados por la Guardia Civil, el chico estuvo hasta las 03.00 horas en la zona del West y se le perdió el rastro dos horas después en la zona de s’Arenal. Un conocido lo vio pasadas las 05.00 hotas caminando por la playa de s’Arenal.
Durante la jornada del sábado, su hermana y una amiga estuvieron tratando de obtener alguna pista sobre su paradero enviando mensajes a través del Whatsapps y en redes sociales, mensajes que no tuvieron respuesta.
El domingo a mediodía, el patrón de una embarcación dio la voz de alerta al advertir la presencia de un cuerpo flotando junto a la bocana del puerto de Sant Antoni.
Hasta el pantalán se desplazaron agentes de la Guardia Civil que advirtieron que los rasgos del cadáver guardaban muchas similitudes con la fotografía del joven que estaba siendo buscado por una joven que acudió al puesto de la Guardia Civil.
Con el caso de este joven ya son cuatro los ahogamientos contabilizados en cuestión de un mes en Sant Antoni. Los tres precedentes tuvieron la playa de es Pouet como escenario.
Nueve días antes de la muerte de Anwaar Lahrichi, una nadador se topó con el cadáver de un joven de unos 30 años y origen asiático que llevaba unas 48 horas muerto. Su desaparición no había sido denunciada y su identidad sigue siendo un misterio.