El órgano de la iglesia de Sant Josep está situado frente al altar, junto al coro. | Arguiñe Escandón

Aunque mucha gente no lo sepa, la iglesia de Sant Josep alberga en su interior una joya de la que pueden estar muy orgullosos sus vecinos. Puede pasar desapercibida cuando se entra en el templo, pero si uno se coloca de espaldas al altar y eleva la vista al coro se da de bruces con este tesoro. Allí está, majestuoso, brillante, orgulloso, un órgano único en el mundo construido en 2006 por el maestro mallorquín Pere Miquel Reynés i Florit.

Uno de los que más sabe de Ibiza sobre esta joya es Jordi Martí, director del Coro Parroquial de Sant Josep y del Coro del Colegio L’Urgell. De hecho, quedar con él para hablar de este órgano es recibir una clase magistral sobre el «rey de los instrumentos», como lo bautizó el mismísimo compositor austríaco Wolfang Amadeus Mozart, y conocer la historia de otros que están en la iglesia de Santa Cruz de Ibiza, en la Catedral, o «el más antiguo que se conserva» y que está en la iglesia de los Dominicos de Dalt Vila.

El de Sant Josep es, según Martí, una joya construida por Reynés i Florit, exalumno del organista catalán Gabriel Blancafort, pionero en la recuperación del órgano tradicional español y constructor en 1978 del de la iglesia de Santa Cruz de Ibiza. Lo hizo en su taller de Mallorca junto a otros dos ayudantes y juntos «tardaron tres años, trabajando los siete días de la semana unas ocho horas diarias».

El resultado es un órgano que, entre otras particularidades, tiene 2.000 tubos «construidos a mano en madera y una aleación de estaño», con tamaños que oscilan entre los cuatro metros y medio los más grandes y 20 centímetros los más pequeños.
Según Martí, cada uno fue perfectamente afinado, medido y comprobado «para que ninguno suene igual, destinándose los de madera a los sonidos más graves y los de metal a los más agudos».

Además, el órgano de la iglesia de Sant Josep puede presumir de tener un sonido especial que no tiene ningún otro en el mundo. Se trata de uno inspirado en la tradicional flaüta ibicenca. «Es impresionante, no escucharás nada igual en ningún lugar del mundo y por eso cuando se planteó su construcción hubo algunas reticencias entre los vecinos. Ahora todo el mundo en el pueblo se puede sentir orgulloso de tener algo tan increíble en su iglesia», aseguró Martí.

Se tardó más de medio año en colocar

El director de los coros de L’Urgell y de Sant Josep asegura que, a pesar de ello, este órgano sigue siendo una joya que en ocasiones pasa desapercibida «a pesar de su calidad artística, estética y sonora».

El equipo de Reynés i Florit empleó tres años en su construcción en un proceso que Martí asegura que fue «duro y muy complejo». Primero realizaron un estudio de la acústica de la iglesia de Sant Josep «para ver las necesidades del órgano teniendo en cuenta que no hay dos iglesias en el mundo que tengan la misma capacidad sonora». Después, se construyó de forma totalmente artesanal la caja hermética donde se acumula el aire del órgano y que recibe el nombre de ánima (alma en latín), y uno a uno sus más de 2.000 tubos. En este caso, el artesano mallorquín los hizo en Alemania y, posteriormente, los trasladó en camión hasta su estudio en Mallorca.

Cuando tenía terminadas las piezas montó el órgano en su taller para ver que todo funcionara correctamente y cuando lo comprobó lo volvió a desmontar para traerlo rumbo a Sant Josep. Pieza por pieza llegó a la iglesia y aquí, según asegura Jordi Martí, los tres artesanos tardaron más de medio año en colocarlo. «Te puedes imaginar que fue como un puzzle ya que todo tiene que estar perfectamente colocado y medido para que no falle absolutamente nada y porque tiene que durar en el mejor estado posible la mayor cantidad posible de años».

Afortunadamente, el equipo de Pere Miquel Reynés i Florit hizo muy bien su trabajo. Han pasado ya 12 años desde su construcción y colocación «y el órgano está en perfectas condiciones». Buena prueba de ello es que anualmente, y para celebrar su llegada a Sant Josep, se celebra un ciclo de conciertos con los mejores organistas del mundo.

Cicle de concerts de Tardor

Este año se celebra la decimotercera edición de este ciclo que recibe el nombre Concerts de Tardor y que está patrocinado por el Ayuntamiento de Sant Josep, la Asociació de Veïns de Sa Raval, el Cor de Sant Josep y la Parroquia de Sant Josep.

El primer concierto tendrá lugar mañana a las 20.45 horas en la iglesia del pueblo con el prestigioso organista italiano Angelo Comotto como gran protagonista. Ofrecerá el concierto Musica sul Pater Noste con las piezas Praeludium d-moll BuxWV 140 del compositor y organista germano-danés Dietrich Buxtehude, la Sonata VI Opus 65 del compositor, director de orquesta y pianista de música romántica alemán Felix Mendelssohn, y la Sonata No.1 in D minor Op.42: Allegro del organista y compositor francés Félix Alexandre Guilmant.

El siguiente concierto del ciclo tendrá lugar el próximo sábado 22 de septiembre a cargo del organista francés Pierre Vidal, y el último será el sábado 24 de noviembre a las 20.00 horas con el organista del Monasterio de Montserrat Andreu Martínez.