Por decreto ley de urgencia, Pedro Sánchez y su Consejo de Ministros decidió sacar los restos de Franco de la basílica de la Santa Cruz del Valle de los Caídos. La familia de quien fuera jefe del Estado ha recurrido esta decisión argumentado la inconstitucionalidad de la misma y alegando que el Estado no es la autoridad competente para llevar a cabo la exhumación; sin embargo, ante la posibilidad de que el presidente Sánchez consiga su objetivo, la familia Franco baraja la posibilidad de que los restos de su pariente se entierren en la cripta neorrománica de la Catedral de la Almudena, un bosque de 400 columnas todas con variaciones escultóricas en sus capiteles, más 20 capillas. Para muchos es la cripta más impresionante que hay en España. Su construcción parcial se terminó en 1911; su fachada mira a la embajada de Armenia y a los pocos restos que quedan de la muralla árabe de Madrid.
Respecto a los baleares exhumado en esta cripta, que pudieran ser en un futuro vecinos lapidarios de Franco, hemos localizado a doña Ángel Cobeño Hoya, menorquina, que nació en Mahón en 1928. Nació en Menorca, seguramente, porque su padre, José Cobeño Cervera, que tiene una calle a su nombre en Getafe, fue comandante farmacéutico y estuvo allí destinado. Este militar tiene ficha en el Archivo de la Memoria Histórica (antes de la Guerra Civil) por lo que tal vez, no tenemos la certeza, fue investigado por el régimen franquista. Seguramente hubiera podido llegar a general pero, ignoramos las razones, se quedó en coronel.
En otra de las tumbas se lee el nombre de Luis Basabé Cotoner (1890-1973) que no es mallorquín pero sí descendiente de José Cotoner Despuig, marqués de Ariany, que murió en 1846. Tampoco es mallorquín Francisco Ascanio Togores, otro de los inhumados en la cripta, aunque un ramal suyo, Togores, sí viene de una familia mallorquina de rancio abolengo y muy ligada a la monarquía. Recordemos que varios Togores participaron en la reconquista de Mallorca, estuvieron en las batallas más duras y en el asedio de Madina Mayurqa.
Los Villaverde y Escandell
Otros sepultados en la cripta son el segundo marqués de Urquijo, el exministro de obras públicas Silva Muñoz, y muchas otras personalidades como el matrimonio que formaron el marqués de Villaverde y Carmen Franco Polo, fallecida hace once meses.
A unos metros de esta lápida se encuentra la tumba de un gran intelectual ibicenco, falleció en 2012, me refiero a mi maestro y amigo el catedrático de Historia, Bartolomé Escandell Bonet, con quien tuve la suerte y el placer de charlar muchas veces en Madrid. Fue profesor de Felipe VI en la Universidad de Alcalá, autor de infinidad de libros, destacando su media docena de tomos dedicados a la historia de Ibiza entre los siglos XVI y XVIII.
Hay más intelectuales sepultados en La Almudena. Uno de los más prominentes es Fernando Chueca Goitia que fue quién terminó la catedra.
Hay muchas lápidas todavía sin nombre. Pienso que la familia de Franco no quiere enterrar al general en el cementerio de El Pardo para evitar el vandalismo. En la cripta de La Almudena sí hay seguridad y cámaras de vídeo-vigilancia. La entrada es de momento gratis, pero en un futuro esto podría variar dado la cripta está en la zona más turística de Madrid y la afluencia pudiera ser importante
1 comentario
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Las ganas que tiene el cum fraude de perder y hacernos perder el tiempo y encima haciendo el ridículo