Jaume Ferrer dejó la secretaría general de Gent x Formentera en abril y fue sustituido por Susana Labrador. | ARCHIVO

Ustedes ya saben que pasado mañana es 1º de enero de 2019. Ese día los suscriptores no recibirán el Periódico de Ibiza y Formentera, ni tampoco estará en los quioscos, que algún día tienen que descansar los repartidores, los técnicos de la planta impresora, fotógrafos, diseñadores, comerciales, administrativas, informáticos y periodistas que se encargan de preparar la edición impresa. Pero seguirá a su disposición, si alguien quiere conocer el nombre del primer niño o niña que nazca en Ibiza en el nuevo año, la edición digital de nuestro periódico.

En esta cabecera, como en el resto de medios de comunicación del Grupo Prensa Pitiusa, trabajan muchos profesionales que ponen todo su empeño e ilusión en lo que hacen.

Intentamos hacerlo lo mejor posible y a veces nos equivocamos (supongo que como todo el mundo), pero procuramos aprender de nuestros errores y así mejorar día a día. Sirva esta introducción para explicarles que estamos lejos de ser infalibles, algo que tampoco pretendemos porque sería una utopía, pero intentamos ser rigurosos y ofrecer toda la información de la que disponemos.

Se nos acusa muchas veces de no cumplir con nuestra obligación de informar, de manipular la información, a veces de mentir. También de no dar voz a todo el mundo. Créanme que procuramos ser lo más independientes y neutrales que se pueda al informar, aunque también tenemos nuestra línea editorial y nuestra opinión sobre las cosas que suceden; y tenemos derecho a expresarla libremente. No renunciaremos a ello jamás.

Libertad de prensa

Estos días me han conmovido las muestras de apoyo y solidaridad de tanta gente con la libertad de prensa. Todo a raíz de la desafortunada -ya veremos si ilícita- incautación por orden judicial de los teléfonos móviles y ordenadores de dos periodistas de Mallorca, para investigar un delito de revelación de secretos. Dicha requisa vulnera, a mi modo de ver, el secreto profesional de los informadores, protegido en la Constitución. Así se ha pronunciado la práctica totalidad de la profesión periodística, al considerar la medida ordenada por el juez Miguel Florit de Palma como un ataque a la libertad de prensa.

Pero lo que me gustaría destacar hoy aquí es que muchas de las muestras de solidaridad con los periodistas, han venido de políticos y jefes de prensa que cotidianamente ponen todas las trabas posibles a la labor de los medios. Cuesta escuchar calladamente el cinismo y la hipocresía de quienes se rasgan las vestiduras en público, pero luego niegan la información a algunos medios e incluso se niegan a atenderles. Podría ponerles decenas de casos en las Pitiusas, pero no les quiero aburrir.

Solo diré, porque creo que a esto tienen derecho todos nuestros lectores a saberlo, que incluso hay alguna autoridad pública que se niega a conceder una entrevista. Está claro que no podemos obligar a nadie, solo faltaría, pero considero que cuando se presume de transparencia y cercanía, negarse a sentarse ante un periodista y contestar a sus preguntas, por incómodas que estas sean, cuando se preside una institución y se tiene un cargo público, eso no está bien. Entra dentro del sueldo informar de lo que uno hace cuando es un representante de la ciudadanía y responder a los periodistas.

Sin entrevistas

El presidente del Consell de Formentera, Jaume Ferrer (Gent x Formentera) no estará de acuerdo con lo que digo, porque hace más de un año que no tiene tiempo para conceder una entrevista a este periódico. Allá él. Pero que quede claro que si no le entrevistamos no es porque no queramos ni porque no lo consideremos pertinente ni relevante; no lo hacemos porque él no quiere.

Soy consciente de que ese es el precio que hemos de pagar por ser críticos, incisivos y molestos con el poder. Pero es bueno que nuestros lectores sepan que no está en nuestro ánimo vetar a nadie ni hurtarles ningún punto de vista, aún menos si es un actor relevante de la vida pública de las Pitiusas, como lo es Jaume Ferrer. Además, no deja de ser paradójico que un partido como Gent x Formentera, que acaba de definir como logotipo de su formación un bocadillo (según la RAE: En grabados, dibujos, caricaturas, chistes gráficos, tebeos, etc., espacio circundado por una línea en el que se contienen las palabras o pensamientos de un personaje), ni su secretaria general, Susana Labrador (vicepresidenta del Consell), ni su antecesor y presidente del Consell, Jaume Ferrer, quieran explicar sus planes de futuro y responder a las cuestiones de actualidad que preocupan a la sociedad de Formentera. Atienden a otros medios pero a Periódico de Ibiza y Formentera, no. Porque ellos no quieren, reitero. Nosotros estaremos encantados de ofrecer a nuestros lectores sus respuestas y todo lo que quieran decir. Públicamente les invito a ser entrevistados cuando les vaya bien, que por nosotros no quedará.

Hay quien presume de democracia, de transparencia, de honestidad, de defensor de la libertad, pero si pudiera amputaría a la ciudadanía pitiusa de su derecho a la información. Prefieren que haya pocos medios, siempre bajo su control o influencia, y que desaparezcan los que critican a su gestión (tan criticada por organismos como la Sindicatura de Comptes de Balears, por citar un ejemplo). Pero nosotros no comulgamos con ese modelo.

Sant Antoni

Para no quedarnos con mal sabor de boca, despido mi último ‘Borrones y tachaduras’ de 2018 aludiendo a los dos candidatos a la alcaldía de Sant Antoni por el PSOE y el PP, Simón Planells y Marcos Serra, respectivamente. El cruce de mensajes a través de Twitter, iniciado por Serra y respondido por Planells, nos hace albergar esperanzas en el futuro. La política no debe ser sinónimo de crispación y debería imperar la cordialidad y la cortesía. Vienen tiempos donde será imprescindible llegar a acuerdos y guardarse el respeto y la consideración debida, facilitará las cosas.

Feliç Any Nou

En nombre de todos los profesionales que hacemos el Periódico de Ibiza y Formentera, les transmito nuestros mejores deseos de paz, amor, prosperidad y salud para todos. Feliz Año Nuevo. Molts d’anys i bons!