Las familias de Vanesa Patricio Escandell y Dani Viñals a la entrada del Senado y acompañadas por el senador popular Santi Marí.

«Después de un largo camino hemos conseguido un primer objetivo. Estamos satisfechos por la aprobación de esta reforma, pero nuestra causa no acaba aquí porque quedan pendientes cuatro flecos que esperamos corregir en la próxima legislatura». Así se manifestaban ayer a las puertas del Parlamento Ramón Viñals y Cati Escandell, minutos después de que el Senado diese luz verde definitiva a la reforma del Código Penal que recoge un endurecimiento de las penas para los conductores que bajo los efectos del alcohol o las drogas provocan un accidente con víctimas.

La norma aprobada ayer por la Cámara Alta endurece las penas a los conductores imprudentes al volante que causen accidentes con muertos o heridos e introduce como delito el abandono del lugar del accidente, es decir, lo mismo que hizo el conductor que arrolló al joven ciclista Daniel Viñals. También endurece las penas para los conductores que circulan bajo los efectos de las drogas y causan una muerte, un supuesto que se dio en el accidente que acabó costándole la vida a la joven ibicenca Vanesa Patricio Escandell.
Las dos familias ibicencas, la de Vanesa y la de Dani sumaron fuerzas ayer en Madrid junto al resto de familias que han pasado por un trance similar y que se fueron sumando poco a poco a la causa impulsada inicialmente por Anna González, quien se quedó viuda en 2013 cuando su marido fue arrollado por un camión mientras pedaleaba en su bicicleta, y cuyo conductor se dio a la fuga. Ayer, seis años después, Anna, Ramón, Teresa y Cati, entre otros, vieron con satisfacción cómo el Senado aprobaba definitivamente el cambio legal que había impulsado. «El que se fugue la va a pagar», celebraron.

La delegación ibicenca estuvo apoyada por el senador popular Santi Marí. La reforma salió adelante con un respaldo mayoritario: 222 votos favorables y los votos en contra, 17, de Podemos. Celia Cánovas indicó que están de acuerdo con el fondo de la Ley, pero no con la forma.

Penas más duras
La reforma del Código Penal prevé que aquellos conductores que causen accidentes con muertos o heridos se enfrentarán hasta a nueve años de cárcel si ocasionan varios fallecidos o hasta cuatro años de prisión si abandonan el lugar del siniestro.

Ramón Viñals indicó que la intención es ir un poco más allá y que las penas también se endurezcan para los causantes de una única muerte. Esta reforma surge a raíz de la campaña #PorUnaLeyJusta, a través de la plataforma Change.org, para exigir que muertes como la del marido de Anna González no quedasen impunes.