La concejala de Urbanismo de Vila, Elena López, junto al alcalde, Rafa Ruiz, durante el pleno de ayer. | Marcelo Sastre

El plan urbanístico de Vila dio ayer un paso hacia adelante para su aprobación. Pero el camino no ha quedado llano como esperaba el Consistorio de Vila tras meses de trabajo. Queda apenas un mes para llegar a la fecha tope que tiene la institución, el 21 de abril. Pasada esa fecha termina el plazo de suspensión del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de 1987, mucho más permisivo, que podría abrir la puerta a la construcción en zonas que se quiere preservar. Hay deberes para el Consell Insular y el Ayuntamiento de Vila y el calendario juega en su contra.

El pleno de la Comissió de Medi Ambient de les Illes Balears (CMAIB) aprobó ayer la declaración ambiental estratégica de la revisión del PGOU de Eivissa. Un texto que, sin embargo, establece una serie de condiciones y modificaciones. Entre ellas se establece que «no podrán llevarse a cabo los crecimientos (urbanos) previstos en la revisión» por falta de suministro de agua.

El presidente de la CMAIB, Antoni Alorda, valoró tras la reunión que la aprobación de este trámite es un paso «importante» hacia la aprobación del texto por el Consell Insular y para evitar que vuelva a estar vigente el PGOU de 1987, «un plan muy desarrollista» y que todas las partes se muestran interesadas en evitar que se aplique. La alternativa presentada se considera «mucho mejor» y «clave para el compromiso con la sostenibilidad».

Agua
Respecto a las restricciones de crecimiento por el suministro de agua, Alorda explicó que se trata de un aspecto «vinculante» de la declaración. Una medida que afectará «a todo lo que tenga condición de suelo rústico que no esté transformado», dejando de lado al suelo urbano, en el que se podrá consolidar lo que ya existe.

Apuntó que el Ayuntamiento ya está realizando gestiones en materia de agua, como una nueva concesión y un plan de gestión sostenible que se debe tramitar. La puesta en marcha de estas medidas servirían para levantar esta limitación en el plazo de «uno o dos años». Sin embargo no supo estimar si con ello se alcanzará el techo de crecimiento hasta los 77.804 habitantes que se fija en la modificación del PGOU.

Ses Feixes
En cuanto a la zona de ses Feixes de Vila, que se está trabajando en paralelo para proteger e incluso ampliar su protección a través del Plan Especial de Ses Feixes, Alorda explicó que en la declaración se concretan una serie de intervenciones «que se tienen que llevar a cabo, que han quedado muy claras en el informe que se ha hecho».

Se trata de modificaciones de planos y adopción de ciertas medidas.

Retrasos
Alorda lamentó que hubieran pasado varios meses «enredando» en el desarrollo del plan. «Es verdad que este informe lo teníamos en octubre. Pero buscando progresos de cara hacia el futuro, pensando en que la próxima legislatura pueda haber otro escenario, se han hecho muchos avances, pero el punto al que hemos llegado es el que es», dijo en referencia a la aprobación de este trámite administrativo a algo menos de un mes de la fecha en la que expira la prórroga de la suspensión del PGOU del año 87.

Trámites
Tras esta aprobación el Consell deberá llevar a cabo los trámites pertinentes para la aprobación definitiva de la reforma del PGOU. Unos trámites que requerirán un plazo mayor o menor conforme a las modificaciones que se lleven a cabo.

Desde la CMAIB indicaron que se había hecho un esfuerzo para que todas las modificaciones se escribiesen de tal manera que fueran posibles de trasponer en el texto legal de forma directa, sin dar opción a una decisión política. Alorda informó que, dado que la decisión la toma el órgano que preside y su aplicación es vinculante, no se tendría que efectuar una trámite de información pública que demoraría su aprobación. «Como se trata de acatar una orden y no de tomar una decisión política esto normalmente no se tiene que consultar a la ciudadanía».

Algo que no quita, manifestó Alorda, que los técnicos del Consell y el Ayuntamiento, que son los que tienen que determinar los trámites a seguir, no valoren que se tiene que llevar a cabo un plazo de exposición pública que podría alargar el proceso.

La concejala de Urbanisme de Vila, Elena López, consideró tras el pleno del Ayuntamiento que el tiempo que queda será suficiente para que se apruebe de forma definitiva el PGOU por parte del Consell Insular. El límite está marcado en el calendario y los técnicos tendrán que trabajar a contrareloj.

EL APUNTE

Modificaciones que podrían requerir información pública

Expertos jurídicos consultados por este medio explicaron que, con las prescripciones y las modificaciones que deben hacerse, el Ayuntamiento debería hacer una nueva aprobación provisional, «para lo que ya no tiene tiempo». El artículo 55.5 de la Ley de Urbanismo de Balears dice que conforme a «la información pública, los informes emitidos y la tramitación ambiental, se introducirán las modificaciones que procedan, sometiéndose a una nueva información pública si estas fueran sustanciales». Y se considera que las modificaciones requeridas lo son. La concejala de Urbanisme de Vila solicitó a la CMAIB que las enmiendas se puedan hacer tras la aprobación del PGOU. Algo con lo que la CMAIB se mostró conforme. Sin embargo serán los técnicos del Consell los que determinen si en esas condiciones se puede aprobar el texto.