El párroco Vicent Ribas bendijo las palmas de los asistentes. | Marcelo Sastre

El pueblo de Snta Eulària se vistió de gala ayer para celebrar su tradicional procesión de palmas con motivo del Domingo de Ramos. Las altas temperaturas hicieron que cientos de personas se acercaran a la localidad para festejar la entrada de Jesús en Jerusalén.

La procesión empezó, como siempre, en la calle Sant Jaume hasta llegar al Puig de Missa; un recorrido que estuvo encabezado por Vicent Ribas, párroco de Santa Eulària, quien bendijo las palmas de los asistentes.

Como cada año, hubo gran participación de niños y niñas que hacen este año la Primera Comunión. Asimismo, la indiscutible protagonista fue La Borriquita formada por Jesucristo, su acompañante y un burro.

En la villa des Riú, se ha convertido en una tradición ver a un borriquito real participando en la procesión. Un año más, Manolito, que así se llama el animal, tuvo tiempo para estar en Santa Eulària y trasladarse junto a sus dueños hasta la ciudad de Vila, donde dos horas después participó en otra procesión que partió de la plaza Pintor Calvet.

En la procesión también participó un grupo de mujeres, con ramas de olivo en mano, en representación del cortejo que acompañó a Jesús en su entrada en Jerusalén.

Finalmente, los fieles que acompañaron a la comitiva encaminaron la calle Sant Jaume para alcanzar el Puig de Missa donde tuvo lugar la misa del Domingo de Ramos.

Más procesiones
La siguiente procesión será la del Jueves Santo a las 21 horas que volverá a salir de la capilla de Lourdes y terminará en el Puig de Missa. Finalmente, el Viernes Santo a las 10.00 horas comenzará el Viacrucis viviente desde el mercado y a las 20 horas se celebrará la tradicional procesión.