Red Eléctrica (REE) presentó ayer los avances alcanzados en Punta l’Avançada del Port de Pollença donde se encuentra su Bosque Marino, «un proyecto pionero» a nivel mundial de I+d+i puesto en marcha en 2012 para restaurar praderas de Posidonia oceánica en Mallorca, una planta marina autóctona del mar Mediterráneo al que otorga su especial color azul turquesa. Hasta la fecha, se han recuperado cerca de 1,5 hectáreas de las 2 previstas, en un proyecto que cuenta con una inversión de medio millón de euros y que prevé finalizar este otoño.

El proyecto de Red Eléctrica --que ha logrado desarrollar una técnica de recuperación de espacios marinos con esta planta acuática y se ha realizado en colaboración con el Instituto Mediterráneo de Estudios Avanzados (CSIC-IMEDEA)-- se concentra en los dos extremos de la conexión eléctrica submarina Mallorca-Ibiza, concretamente en las bahías de Santa Ponça (Mallorca) y de Talamanca (Ibiza). En las áreas de restauración de la pradera se ha aplicado la metodología de recolección, cultivo y plantado de posidonia empleada en el proyecto desarrollado previamente por Red Eléctrica y el IMEDEA en ambas bahías.

Una vez finalizados los trabajos que se están llevando a cabo en la actualidad en la bahía de Pollença (Mallorca), se habrán recuperado hasta 15.000 metros cuadrados, de los 20.000 proyectados, y se habrán plantado aproximadamente 8.000 fragmentos de posidonia, de los 12.800 previstos por lo que, hasta la fecha, se ha completado la plantación del 60% de la superficie. La posidonia no es un alga sino una planta con raíz, tallo y hojas, capaz de producir grandes cantidades de oxígeno fundamental para la vida de algas, esponjas y peces. De este modo, se asemejan a pequeñas selvas en miniatura que crean hábitats donde gran cantidad de especies encuentran el lugar idóneo para vivir.