El hecho de que la entrega de los tanques de tormentas no se ejecute hasta el último trimestre de este año, a pesar de que sus obras finalicen «en breve», según concretaron desde el Ministerio para la Transición Ecológica, no es una buena noticia para los comerciantes de la zona del puerto.

Según criticó Joaquín Manuel Senén, vicepresidente de la Asociación de Comerciantes de la Marina–Puerto de Ibiza, «nos están tomando el pelo». Y es que, a su juicio, hay que dejar la política a un lado para dar una solución a un problema que está a la orden del día: los vertidos fecales.

«Se tiran los trastos de unos a otros, que si esto es de Madrid... y tendrían que ir todos los partidos políticos de la mano para que esto se arregle de una vez», matizó Senén.

El miedo de los comerciantes del puerto, dijo, es que, cuando el tanque de tormentas entre en funcionamiento «puede no dar abasto hasta la nueva depuradora», indicó. «Ya vimos en agosto del año pasado que se rompió la tubería de fibrocemento y si no la cambian y la agrandan, puede volver a pasar», añadió.

El vicepresidente de la Asociación insistió en que el tanque de tormentas da un margen, «pero si la tubería se rompe, estamos en las misma». De hecho, recordó que el año pasado no se reparó hasta pasados cinco días.

Por ello, mostró su «preocupación» ya que dijo que, cualquier avería, desemboca en un vertido de fecales; algo que, a su parecer, es una «trastada» muy grande.

Es más, Senén subrayó que ni siquiera es necesario que llueva, ya que el último episodio de vertidos en el puerto coincidió con un día soleado. «Los de Ibiza Magna están más preocupados incluso que nosotros porque las fecales salen justo ahí», indicó.

Por ello, pidió a las diferentes formaciones «que dejen de inaugurar plazas y parques y arreglen lo que hay por debajo de la ciudad» porque, reiteró, «es preocupante».