Ayer se celebró la primera reunión en el Tamib entre la empresa y los trabajadores. | Toni Planells

Las posiciones están muy distantes entre Valoriza, la empresa que ostenta la contrata para el servicio de limpieza y recogida de residuos de Vila, y sus trabajadores. Ayer, tras más de dos horas de reunión en el Tribunal de Arbitraje y Mediación de las Illes Balears (Tamib), las partes pidieron un aplazamiento hasta el próximo miércoles por la tarde.

La falta de acuerdo ya se intuía tras el receso que hubo después de una hora y media de negociación. Las caras de los trabajadores y de los representantes de la empresa no indicaban ningún atisbo de tranquilidad, sino más bien la tensión de enfrentarse a un oponente que no da su brazo a torcer. Los trabajadores y los representantes sindicales, entre los que estaban los secretarios generales de CCOO, Felipe Zarco, y de UGT, Fernando Fernández, se reunieron en una sala contigua a la de la mediación. Mientras tanto los negociadores de la empresa iban de acá para allá haciendo llamadas de móvil.

Posiciones distantes
Felipe Zarco resaltaba tras la reunión la gran distancia que existe todavía entre ambas partes. «Nos hemos emplazado para el miércoles para estudiar cada cual las propuestas del otro, hacer números e intentar estrujarnos los sesos para llegar a una solución. De momento lo veo lejano pero de aquí al 29 todavía cabe la posibilidad de que se acerquen posturas y no llegar a la huelga”, relataba.

Por su parte, Fernando Fernández lamentó que «la reunión no haya sido fructífera». Sin embargo señaló que todavía queda tiempo para negociar y que este aplazamiento sirve para dar «un margen de maniobra y poder estudiar una propuesta que ha hecho la empresa» con la que no están de acuerdo, que implicaría una subida salarial ligada a objetivos y no consolidada en el salario base.

La reivindicación que plantean los trabajadores se ciñe al IV acuerdo para la negociación colectiva. Un documento que firmó Valoriza directamente. Algo que desde la empresa reconocen, «pero dicen que no es un documento vinculante y que cada empresa negocia una cosa diferente», explicó Zarco.

A este respecto el secretario general de CCOO en Ibiza valoró que «aunque es verdad que no es vinculante cada uno se tiene que hacer responsable de lo que firma». «Nosotros pediamos un 28% de subida salarial en 4 años, pero en la segunda reunión bajamos a un 12% en 4 años que es lo que marca el acuerdo nacional para la negociación colectiva. Los queremos hacer responsables a ellos de esa firma y que se comprometan a cumplir», anunció.

Presencia del Ayuntamiento
Por parte del Ayuntamiento de Ibiza acudieron a la mediación los concejales Jordi Salewski, del área de Medio Ambiente y Transición Energética; y Estefanía Torres, concejala de Hacienda, Trabajo y Formación.

A la salida, Salewski explicó que como Ayuntamiento acudieron a la reunión como parte afectada y preocupada por esta convocatoria de huelga, aunque recordó que la administración local, aún siendo la contratista del servicio, es un tercero en el conflicto. «El papel del Consistorio en las negociaciones es el de fomentar el debate para alcanzar un entendimiento entre trabajadores y empresa», explicó.

Detalló que en esta reunión «se han planteado números y propuestas tanto a nivel económico como de medidas sociales» y se mostró esperanzado respecto a la llegada a un acuerdo antes del 29 de julio, fecha para la que los trabajadores han planteado el inicio de la huelga del servicio de limpieza y recogida de basura.