La institución considera que es «complicado» mezclar los diferentes usos del transporte. | DANIEL ESPINOSA

Las concesiones actuales de transporte público se prorrogarán un año más, lo que significa que la nueva licitación no saldrá hasta 2021. Así lo confirmó ayer Javier Torres, vicepresidente segundo del Consell d’Eivissa y conseller de Transports, tras una reunión con los concejales de Mobilitat de los ayuntamientos de la isla.

En este sentido, justificó que «los plazos son los que son y la prórroga se tiene que hacer sí o sí de cara al año que viene». Y es que el objetivo del equipo de gobierno pasa por «hacer las cosas con calma, estudiar bien cómo está el tema y hacer las modificaciones que sean necesarias».

Asimismo, Torres añadió que la idea es poder tenerlo todo «en marcha» en 2021. «Es evidente que no hay tiempo para aprobar el Plan Insular de Transporte, que sería el primer documento para elaborar esta nueva concesión», recalcó.

El conseller también indicó que habrá cambios respecto a la idea fijada en la anterior legislatura, como la separación del transporte escolar del regular. «Creemos que es complicado mezclar los diferentes usos del transporte público. Habrá dos lotes y dos concesiones y las empresas pequeñas de autobuses discrecionales podrán dar, también, este servicio», subrayó Torres.

Por otra parte, el vicepresidente segundo de la máxima institución insular dijo que, a partir de ahora, celebrarán reuniones individuales con cada concejal para ver qué mejoras se pueden introducir en temas de transporte público, como pueden ser frecuencias, compensación de unas líneas con otras o dar mayor cobertura en algunos barrios.

Entre ellas, se habló de la línea que va al aeropuerto y que pasa por Sant Jordi, en la cual prevén que pare en el colegio y en la residencia de Can Raspalls para facilitar el desplazamiento de personas con movilidad reducida.

Intrusismo
En la reunión mantenida ayer en el Consell también se habló del problema del intrusismo en el sector del transporte, haciendo hincapié en los ‘taxis pirata’. Por ello, la Guardia Civil junto con los inspectores de transporte reforzarán las actuaciones y actuarán con «más contundencia» para atajar un problema que, a juicio de Torres, «es muy difícil de combatir».

El conseller recordó que no solo hay ‘taxis pirata’, sino también VTCs ilegales e irregulares que actúan fuera del término en el que tienen permiso. «Ahora tenemos tres inspectores e intentaremos, dentro de nuestras posibilidades, reforzar la inspección en todas las áreas», insistió.

Además, el Consell quiere fijar un reglamento único del GPS para toda la isla al considerar que es importante homogeneizar las condiciones del servicio del taxi. «Hay que recordar que es un servicio público y tenemos que asegurarnos de que tenga unas condiciones óptimas para que todos puedan disfrutarlo», concluyó.