Los hechos ocurridos en una timba que se celebró hace seis años en ses Figueretes y que terminó con disparos van a ser vistos por segunda vez ante un tribunal.

Dos personas fueron juzgadas en su día por perpetrar un supuesto atraco, del que fueron absueltos, y ahora han decidido emprender acciones legales contra el hijo del propietario del establecimiento al que acusan de dispararles y de causar heridas a uno de ellos.

Sólo los dos hombres que fueron acusados, y absueltos tras un juicio celebrado en su día y en el que al menos uno de los imputados tenía antecedentes penales, han presentado cargos en este caso. El ministerio público no decidió personarse en una causa que el juzgado, ante una nueva versión, decidió aceptar a trámite. La acusación particular pide un año de cárcel y una indemnización próxima a los seis millones de pesetas.