Un jurado se reunirá el próximo lunes en Mallorca para juzgar por primera vez un caso de asesinato ocurrido en Eivissa. En el banquillo se sentará Manuel P.O., el joven que a principios del año pasado se entregó a la Policía Local de Santa Eulària para confesar que había matado a su novia y que en los primeros momentos hizo creer a la investigación que la tragedia se había producido en un accidente ocurrido durante una violenta discusión. La autopsia, por contra, reveló que Antonia Cruz Ortiz, de 28 años,murió estrangulada.

La Fiscalía ha decidido finalmente pedir para el acusado una condena por homicidio, con penas de diez años de prisión. La acusación particular, por contra, ha elevado su calificación a la de asesinato -con 17 años en juego- al entender que Manuel P. O. actuó con alevosía y premeditación.

Ante el jurado que se ha citado para emitir el veredicto de inocencia o culpabilidad, se pondrán hechos, en circunstancias todavía no aclaradas totalmente, que ocurrieron en la madrugada del 23 de enero en el piso que la pareja compartía con una tercera persona en la calle Huesca. La acusación particular, en ese sentido, considera que el sospechoso actuó con extrema sangre fría al considerar que tenía pensado dar muerte a su novia, persona con la que ya había protagonizado otras discusiones que habían sido escuchadas por el vecindario.