Un miembro de la UME arrastra la manguera mientras su compañero refresca una zona ya libre de grandes llamas.

Ayer a mediodía el president del Govern, Francesc Antich, compareció ante la prensa en la zona del incendio acompañado del conseller de Medi Ambient, Gabriel Vicens, y su homólogo ibicenco, Albert Prats, quien por un lado celebró que, finalmente, el «emblemático» núcleo turístico de la playa de Benirràs no fuera afectado por el fuego y, por otro, advirtió del importante impacto medioambiental y paisajístico en una zona especialmente tupida y rica desde un punto de vista forestal, sobre todo en el flanco derecho del incendio, desde el punto de origen, muy cerca de Benirràs, hacia Punta Xarraca. De hecho, el conseller Gabriel Vicens declaró a Europa Press que esta zona, el flanco derecho, será «más difícil» de regenerar, ya que años atrás ya fue castigada por otros dos incendios, uno de ellos el año pasado.

Por su parte, el president Antich dijo que nunca en Eivissa se habían visto tantos medios aéreos trabajando en la extinción de un fuego forestal y destacó la «muy buena colaboración» entre los diferentes organismos que participan en las tareas de extinción.

En ese momento, las doce del mediodía, Vicens aún esperaba que los numerosos medios aéreos y los tres centenares de personas que en tierra trabajan en la extinción permitiera que ayer mismo se declarara extinguido el incendio.

Tanto Vicens como Prats celebraron que no se haya producido ninguna desgracia personal a pesar de la lógica masificación que el domingo por la tarde soportaba Benirràs. Finalmente, Prats recordó que la labor que realizan los especialistas es un «trabajo arriesgado». Después llegó el delegado del Gobierno, Ramon Socias, que declaró en el mismo sentido que los anteriores.

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Aunque nada tiene que ver con el incendio, la prensa preguntó al conseller insular Albert Prats acerca de la organización de fiestas en las playas.

Prats dijo que en su opinión no deberían hacerse. Por su parte, el delegado del Gobierno, Ramon Socias, dijo que siempre que cuenten con los permisos pertinentes se pueden celebrar.

El fuego comenzó sobre las cinco de la tarde, horas antes de que comenzara la famosa fiesta de los tambores de Benirràs.

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