A golpes de azada, palas y bates de béisbol. Así acabaron dos albañiles que tenían que sentarse ayer en el banquillo del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa después de que ambos resultaran heridos en un suceso que tuvo lugar en septiembre de 2008 en una obra en el Camí Vell de Benimussa. El principal acusado, natural de Marruecos y de 39 años, se enfrenta a tres años y nueve meses de cárcel mientras que el fiscal pide dos años y medio para el otro acusado, un ecuatoriano de 49 años. El juicio tuvo que aplazarse por la incomparecencia de distintos testigos.

Según el escrito fiscal, la primera pelea tuvo lugar cuando el albañil ecuatoriano se sintió molesto porque su compañero no estaba trabajando y decidió dar aviso al encargado.

Fue entonces cuando supuestamente el segundo implicado le atacó con una azada. Su ya opositor logró esquivar el golpe, al tiempo que con una pala agredía, a su vez, al otro individuo, que resultó malherido en la cabeza.La disputa de ambos, sin embargo, no acabó aquí. El obrero marroquí regresó horas después al mismo escenario, pero esta vez acompañado de otras tres personas que no han podido ser identificadas.

Esperando

Mientras que uno de ellos aguardaba en un coche, los otros dos y el acusado, armados con palos y bates de béisbol apalearon al ecuatoriano. Uno de ellos, además, le roció la cara con un spray para cegarlo. Logrado su objetivo, huyeron dejándolo maltrecho con lesiones en la cabeza y contusiones por todo el cuerpo.