Un delincuente de Eivissa, J.J.M.G., de 47 años, natural de Baza, y con doce antecedentes policiales, fue detenido después de que supuestamente intentara vender en un taller un tester de diagnóstico de vehículos robado cuando en dicho lugar precisamente se tenía conocimiento de la sustracción de esta maquinaria. Dicho tester estaba valorado en 4.500 euros.

Tras ser avisada la policía, el sospechoso afirmó que dicho aparato de lo había entregado un amigo suyo en pago de una deuda.