No hay novedades sobre la desaparición del cura de Ampuero, Adolfo Linares, en Eivissa hace un mes. Policía y Guardia Civil lo buscan por toda la Isla. El rastro de Linares se perdió en un acantilado de es Soto al que supuestamente llegó en una moto que había alquilado previamente para recorrer la Isla.

El vehículo fue localizado el 7 de julio. Tres días después, el 10, estaba prevista la llegada del sacerdote al aeropuerto de Bilbao, extremo que no se produjo.

Al tiempo que continúa la búsqueda, prosiguen también con la investigación, aunque es «complicado» saber qué le sucedió a Linares. Así, se barajan distintas hipótesis, entre las que figura una posible caída por los acantilados.

De todas formas, aseguran que es difícil determinar qué pudo ocurrir porque «no hay datos» sobre su desaparición, al margen de la moto hallada. También encontraron ropa cerca del vehículo pero comprobaron que no era del párroco.