Seis meses de cárcel por amenazar, delante de la policía, a unos menores a los que previamente golpeó con una defensa extensible cuando creyó que le robaban. Ésta es la condena que ha impuesto la magistrada Martina Rodríguez, titular del Juzgado de lo Penal número 2 de Eivissa, a un comerciante de Platja d’en Bossa que tuvo que sentarse en el banquillo semanas atrás para responder de un altercado ocurrido en su establecimiento en la madrugada del 26 de julio de 2008.

La juez, que entre multas e indemnizaciones obliga al acusado a pagar una cantidad superior a los 900 euros, condena también a dicha persona por sendas faltas de lesiones, y no por delito, y lo absuelve de los cargos de desobediencia grave que también pesaban contra él. La sentencia, que deberá esperar ahora la decisión de la Audiencia Provincial al haber sido recurrida, establece que el empresario no actuó en ningún momento en legítima defensa y que se extralimitó de manera desproporcionada al abalanzarse contra los menores con los que tuvo el incidente.

Dicho suceso ocurrió después de que un grupo de adolescentes se acercó a la tienda y uno de ellos supuestamente introdujera un euro en una máquina expendedora de refrescos que había en el exterior del inmueble. La máquina no dio el producto solicitado, como tampoco expelió la moneda que, según uno de los afectados, había echado.

El joven pidió al comerciante que le devolviera dicha cantidad, iniciándose una trifulca a causa de esta cuestión por las dudas suscitadas en el empresario. La disputa alcanzó su mayor virulencia cuando el menor que puso el euro cogió un bote de protección solar (valorado en 20 euros, según el acusado) y dijo que se lo llevaba a cambio del euro que no se le devolvía.