El ayuntamiento de Sant Joan de Labritja ha pedido a sus vecinos y turistas que extremen las precauciones para que este verano no se produzcan incendios forestales como los de Can Rafila y Benirrás en 2010 y de Es Amunt en 2011.

Con esta medida de prevención, ya puesta en marcha desde ayer hasta el 15 de octubre, el consistorio de suma a la campaña que ha iniciado el Govern Balear para concienciar sobre los riesgos que conlleva hacer fuego en el bosque durante la temporada estival, según ha informado en una nota de prensa.

En los próximos días el Ayuntamiento enviará una carta a los propietarios de viviendas ubicadas en zona forestal para que tomen medidas como limpiar la vegetación de alrededor de sus casas, crear franjas de seguridad y vías de acceso desbrozadas, y mantenerse alejados de combustibles o materiales inflamables.

Asimismo, el consistorio ayudará a los vecinos a evaluar el nivel de riesgo de su viviendas y brindará apoyo técnico en la prevención de incendios en zonas forestales habitadas, y el Instituto Balear de la Naturaleza (IBANAT) apoyará en la tala de pinos, si es necesaria para la prevención, a los vecinos que lo soliciten.

El verano pasado, el incendio de la Sierra de Morna en Sant Joan de Labritja fue el peor de Baleares en una década y quemó 1.576 hectáreas a finales de mayo. El incendio de Benirràs, también en el mismo municipio, quemó 354 hectáreas a finales de agosto de 2010.