El fiscal reclama una pena de un año de cárcel para una acusada de atentado contra cuatro guardias civiles, tres de los cuales aseguran que resultaron heridos durante la detención de la mujer, por lo que también se la acusa de tres faltas de lesiones por las que se le piden sendas multas de 210 euros e indemnizaciones de 560, 500 y 400 para los agentes. La mujer, por su parte, también ha denunciado a los guardias civiles por abuso de autoridad. M.R.P. es una conocida empresaria de Sant Antoni de 46 años de edad. Ayer, en el juicio, su abogada presentó 1.200 firmas, recogidas en apenas cuatro días, en las que vecinos de Sant Antoni declaran la honradez y solvencia moral de esta mujer, si bien no fueron aceptadas como prueba por la juez porque, argumentó, nada tiene que ver con el asunto que se juzga.

Los hechos ocurrieron el sábado en el Passeig de ses Fonts de Sant Antoni. La mujer iba en moto cuando un coche patrulla la adelantó de forma peligrosa, según su relato, de forma que la hizo tambalearse. El coche llevaba las luces de emergencia, pero no la sirena, según ella. Los guardias dicen que también la sirena. A la altura de la parada de taxis, la mujer recriminó al conductor que le pasara tan cerca, y ahí comenzaron los problemas.