La vista oral por este caso se celebró en el Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa el pasado 10 de julio. | Marco Torres

V.R.P., natural de la Isla, ha sido condenado a la pena de nueve meses de cárcel por colocar en el cuello de su hijo, de doce años de edad, un collar de adiestramiento para perros y someterle a una descarga eléctrica a través de este ingenio. Tras la agresión a su hijo, el hombre mantuvo una discusión con su pareja, a la que llamó «puta», y, además, golpeó al menor en el cuello, se indica en la sentencia, firmada el pasado 10 de julio por la titular del Juzgado de lo Penal número 1 de Eivissa, Clara Ramírez de Arellano. En la sentencia se explica que este hombre, de 51 años de edad, ha sido condenado por los delitos violencia doméstica y de género, maltrato familiar y una falta de injurias.

Los hechos ocurrieron en la mañana del 22 de julio en el domicilio familiar, situado en el municipio de Santa Eulària. «Con la intención de ocasionarle un menoscabo físico, colocó a su hijo un collar de adiestramiento para perros, recibiendo este una descarga eléctrica», señala la sentencia. Según se destaca en el capítulo de hechos probados, «el menor sufrió eritema cutáneo en cuello por efecto eléctrico y trastorno adaptativo postraumático que curaron en siete días no impeditivos, con una primera asistencia y sin secuelas». La juez ha condenado a V.R.P. indemnizar a su hijo con 50 euros por cada día de curación, lo que hace un total de 350 euros.