Las nueve personas que fueron identificadas por los agentes de la Brigada de Juego de la Jefatura Superior de Policía de Balears cuando participaban en una timba de póker en una vivienda del extrarradio de Santa Eulària se enfrentan a penas que oscilan entre los 6.000 y los 600.000 euros, según se trate de simples o jugadores o de organizadores, informaron ayer desde la Direcció General de Indùstria i Comerç del Govern balear.

«Los jugadores se enfrentan a multas de entre 6.000 a 60.000 euros, y los organizadores a multas de 60.000 a 600.000 euros», concretaron desde la Direcció General.

La Policía Nacional irrumpió en este local en el que, supuestamente, se realizaban juegos de cartas en los que se apostaban cada día cantidades que oscilaban entre los 5.000 y los 25.000 euros, informó la Policía Nacional de Mallorca, Isla desde la que se ha coordinado esta operación. En este lugar se podrían «haber movido más de 216.000 euros durante el mes de octubre», añadieron.