La acusada, ayer, en el banquillo de los acusados, durante la primera jornada del juicio por homicidio. | Alejandro Sepulveda Soler

«Me ha dolido lo que ha sucedido». Alba Mary Mesa Reyes, la acusada de apuñalar en el cuello y matar a su exnovio, César Augusto Rendón en Sant Antoni insiste en que se defendía de una violación. La mujer de 36 años de edad insistió en la primera jornada del juicio por el crimen en que esa noche se reunió con su expareja y que, una vez en el coche, la víctima le llevó a un descampado.

La acusada relató que: «Empezó a decirme que quería estar conmigo, que no aguantaba más. Me cogió del brazo con la mano derecha y con la otra me tocaba. Entré en pánico y le pedía que me dejara bajar. Él decía que no». Alba Mary explica que entonces buscó en el coche algo con lo que defenderse. Encontró un cuchillo de grandes dimensiones justo al lado del freno de mano. «Él lo vio, pero la obsesión de esa noche era estar conmigo y no hizo nada por dejarme salir». Al contrario, la versión de la acusada es que le sujetó la mano en la que llevaba el cuchillo y siguió manoseándola e intentó quitarle los pantalones.