Imagen de algunos de los asistentes en dirección al puerto deportivo de Santa Eulària.

Varios cientos de personas, entre motoristas y caminantes, participaron ayer en el emotivo homenaje que se realizó sobre las cuatro y media de la tarde en Santa Eulària al joven Marc Márquez Clapés, que falleció el domingo de la semana pasada en un accidente de moto en el paseo marítimo de Santa Eulària. Tenía 17 años de edad.

Sobre las cuatro de la tarde comenzaron a aparecer motoristas desde todas las esquinas de Santa Eulària para juntarse en la parada de autobús situada junto al mercado. Allí también se reunieron muchos amigos y conocidos de Marc, algunos de ellos con camisetas con su foto y su nombre en la parte de adelante y con el emblema MZ-72 en el dorso, que era la marca que el joven llevaba en su moto y en su casco.

En el puerto

Pasadas las cuatro de la tarde, y escoltados por agentes de la Policía Local de Santa Eulària y patrullas de la Guardia Civil, los motoristas descendieron hacia la calle Sant Jaume en medio de una gran humareda y un gran estruendo hasta que llegaron a la zona del puerto, donde aparcaron sus vehículos y, ya a pie, se dirigieron hasta el lugar en el que se produjo el accidente el domingo pasado.

La desgracia ocurrió hace una semana sobre las seis y media de la mañana. El joven motorista no vio las vallas de obra con las que se estrelló y acabó chocando contra uno de los arbustos del paseo marítimo.

Una vez en el lugar del accidente fue cuando se produjeron los momentos más emocionantes. Muchas lágrimas en recuerdo del joven. La familia, arropada por los amigos del joven, se abrazaron mientras se leyó un pequeño texto en su memoria: «Sabíamos que Marc era muy querido, pero no imaginábamos hasta qué punto; sois un gran ejemplo a seguir».