Los dos acusados del asesinato de un hombre de 38 años en Eivissa en septiembre de 2010 han negado hoy los hechos que les atribuye el tercer encausado en su declaración ante el tribunal del jurado que les juzga en Palma y han recalcado que ni siquiera conocían a la víctima.

Los hombres a quienes el tercer acusado señala como autores materiales de la muerte a golpes y cuchilladas de un ciudadano colombiano que supuestamente les debía dinero han asegurado en la primera jornada de vista oral que no intervinieron en ningún crimen.

Sin embargo, el tercer acusado ha afirmado que los otros le ofrecieron 10.000 euros para que llevara a la víctima a un lugar apartado en el campo para reclamarle la deuda, pero cuando hizo lo pactado presenció como lo mataban de una paliza y una puñalada en el pecho.

Este acusado ha destacado que durante la paliza no pudo hacer nada porque le estaba apuntando con una pistola: «Me quedé bloqueado porque creía que me iban a matar».

Además, ha asegurado que los otros dos encausados le hicieron dos fotografías al cadáver con su móvil con la intención de mandársela a alguien, lo que sugeriría que fueron contratados por una cuarta persona. Sin embargo, al final se quedó él con el móvil y posteriormente borró las fotografías y destruyó el dispositivo.

También ha confesado que se quedó con el coche de la víctima y lo vendió para costearse su adicción a la cocaína.

Posteriormente ha declarado uno de los presuntos autores materiales del asesinato, cuyo ADN estaba en varias colillas amontonadas cerca de donde fue encontrado el cadáver y que tenía unas botas con tierra de la mismo lugar.

El acusado ha afirmado que solía ir a cazar por esa zona. «Conozco muy bien el lugar de los hechos» y no es un buen sitio «para esconder un cadáver», ha afirmado a preguntas de su abogado.

El otro presunto autor directo del asesinato, un ciudadano portugués de 48 años, ha explicado que se encontraba en Portugal cuando sucedieron los hechos. Ha negado cualquier participación en el crimen y, además, que sea suya la voz de grabaciones realizadas por la Guardia Civil que se han reproducido en la sala.

Los letrados defensores de los dos acusados de matar al ciudadano colombiano y tratar de esconder su cadáver pide su absolución porque entienden que no existen pruebas contra sus clientes más allá de la declaración del tercer encausado, quien habría inculpado a los dos hombres por enemistad.

También ha declarado hoy como testigo uno de los guardias civiles que llevó a cabo la investigación que se saldó con la detención de los tres encausados y el juicio, que acumula retraso por la demora ayer en la elección del jurado, continuará mañana con nuevos testimonios.

La Fiscalía reclama para cada uno de los dos acusados de asesinato 23 años de prisión y 20 para el que delató a los otros como cómplice, o alternativamente 11 años de reclusión si se le considera únicamente cooperador necesario.