La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Ciudad Real acoge el próximo martes y miércoles, 9 y 10 de diciembre, el juicio contra una mujer de 23 años de edad --R.M.I.G-- y su pareja de 31 --J.G.O-- por agredir sexualmente al hijo de la joven, que en el momento de los hechos tenía 18 meses de edad. Piden 15 años de prisión para cada uno de ellos por un presunto delito de agresión sexual a un menor de trece años.

Según el escrito de acusación del Ministerio Fiscal, J.G.O., con antecedentes penales por otros delitos, y R.M.I.G., iniciaron una relación de pareja en 2012. La procesada residía con su hijo menor en Alcolea de Calatrava, si bien, una vez obtuvo puesto de trabajo a en Ciudad Real, comenzó a desplazarse junto con el menor al domicilio del procesado, donde permanecían conviviendo de viernes a lunes, asumiendo este gran parte de la atención y cuidados del niño.

En la primeras semanas de octubre de 2012, la procesada se instaló en la vivienda de su pareja y el día 8 de octubre de 2012 el menor fue asistido en el servicio de urgencias pediátricas por presentar fiebre y deposiciones de consistencia blanda, siendo diagnosticado de síndrome febril de corta evolución y posible virosis.

Una vez en la vivienda, los procesados, puestos de común acuerdo o, en todo caso asumiendo la realización de la actuación que a continuación se describe, con un evidente ánimo libidinoso y en el contexto de una actividad de carácter sexual, sometieron al niño a una conducta sexualmente violenta tras sujetarle fuertemente la cara con una mano para inmovilizarlo, consistente en penetración anal.

Señala el fiscal que le produjo lesiones de extrema gravedad, de tal modo que de modo inmediato comenzó a presentar síntomas tales como vómitos, abultamiento del abdomen, sudoración, siendo trasladado por el procesado hasta el servicio de urgencias del Hospital General Universitario de Ciudad Real a las 1.26 horas del día 11 de octubre de 2012, donde fue intervenido quirúrgicamente con carácter urgente por el inminente riesgo vital que corría.

A consecuencia de los hechos, el menor recibió el alta hospitalaria el día 2 de noviembre, tras un periodo de ingreso de 20 días para alcanzar la estabilidad lesional.

El procesado está en prisión provisional desde noviembre de 2012, mientras que la madre del menor estuvo en prisión desde ese mismo mes hasta el 14 de febrero de 2013, que fue puesta en libertad, aunque se le impuso la prohibición de aproximarse a una distancia inferior a 300 metros y comunicarse con su hijo.

Por estos hechos, que el fiscal considera constitutivos de un delito de agresión sexual a menor de trece años, pide para cada uno de ellos 15 años de prisión, así como la prohibición de acercarse a 300 metros y comunicarse con el menor por un periodo de 20 años. Considera que procede imponer también para ambos la medida de libertad vigilada durante seis años y quitarle la potestad a la madre.

Reclama también, en concepto de responsabilidad civil, que los procesados indemnicen al menor, en la persona de su representante legal, con las sumas de 1.840 euros por los 23 días de hospitalización, 1.200 euros por los 20 días de estabilización lesional y 3.000 euros por la secuela consistente en cicatriz de laparotomía.